Anabel Pantoja y Omar Sánchez vivieron una boda de lo más romántica. Al ritmo de I will always love you, los novios se dijeron el "sí, quiero" arropados de emotivos discursos, como el de Isa Pi. Se pusieron los anillos, se besaron apasionadamente y pusieron rumbo a la noche más loca de la mano de la colaboradora más salvaje de Sálvame.
De entre los 70 invitados que asistieron al enlace, el fiestón estuvo protagonizado por la "princesa de pueblo" por excelencia: Belén Esteban. Micrófono en mano, la de San Blas gritaba un "vamos gordi" para encargase de que no decayese la fiesta. Fue por ese motivo que se coronó como "el alma de la fiesta", tal y como se atrevieron a llamarla el resto de los asistentes.
Música por doquier
Las canciones siguieron de la mano de las pantojitas, que quisieron hacerle un homenaje a la tonadillera por excelencia de nuestro país. Anabel e Isa Pantoja se animaron a entonar a dúo la famosa canción de su tía, Así fue. Le pusieron mucho sentimiento y emoción, tanto que el resto de invitados se sumaron al canto.
Para sorprender a todo el mundo, y en especial a su "negro", Anabel apareció en la fiesta con un segundo vestido. Si el primero de la firma Rue de Seine ya había acaparado todas las miradas de sus familiares y amigos, el segundo los dejó boquiabiertos. Esta vez optó por un sencillo diseño de inspiración lencera de tirante fino pero con un pronunciado escote del sello Virginia Abzueta. Un traje que le permitió bailar hasta altas horas de la madrugada.
Muchas emociones
Pero la noche también tuvo algunas pinceladas de momentos emotivos, en especial, el que protagonizó la novia con su amiga del alma, Susana Molina. Anabel decidió otorgarle el ramo de novia que le habían preparado sus compañeros de Sálvame. Con la canción Amiga mía de Alejandro Sanz sonando de fondo, las amigas se fundieron en un tierno abrazo.
En definitiva, fue una noche llena de emociones, como si de una montaña rusa se tratase. Una noche que fue retransmitida íntegramente por Instagram y sobre la que sus protagonistas aún no se han pronunciado --ya que seguirán durmiendo después de tanto trasnochar--.