Esta semana ha sido el turno de Emmy Russ de explicar la curva de su vida. La joven alemana ha conseguido narrar unos traumáticos episodios que la han hecho ser hoy quién es. El motivo principal por el que siempre intenta buscar una relación estable y se fija en chicos mayores es porque su padre la abandonó de pequeña.
Al parecer, él tenía una carácter muy difícil y a veces violento: "Pegaba a mi madre y a veces a nosotros". Cuando se separaron, empezó un largo y tedioso juicio por su custodia, ya que todavía era menor de edad. "Mi padre no me quería, solo quería que mi madre me pagase el dinero", ha relatado.
Duros momentos
En ese momento, Emmy sintió que le faltaba "la figura masculina" y, cuando se mudó a Alicante con su madre, empezó a llevar una mala vida. Asegura que se enamoró de un hombre mucho mayor de ella, "de 37 años. Cometí muchos errores, me portaba mal conmigo misma, no me cuidaba, salía de fiesta, me separé de mi madre...".
Siguiendo la estela de su padre, la alemana ha confesado que con esa pareja también tuvo una mala vida: "Pensaba que era el amor de mi vida, pero fue una relación de dos años muy tóxica". Se lamenta de no haberlo visto antes, pero revela que sufrió violencia verbal y física de su parte, e incluso amenazas de muerte hacia su familia si no volvía con él.
Nueva vida
Sin embargo, después de mucho tiempo, Emmy ha conseguido superar todos los baches que ha atravesado en su vida. Ahora asegura que se encuentra en su mejor momento. "Tengo ganas de seguir con este camino", ha finalizado la alemana.