Visiblemente desolada al relatar el horror que vivió en los últimos años de relación con Antonio David Flores, Rocío Carrasco cuenta cómo poco a poco el que fuera su marido le fue arrebatando las fuerzas

Con un segundo embarazo lleno de angustia, tristeza y disgustos, Rocío Carrasco reconoce que ella sabía que algo no iba bien desde el principio: "Yo sabía que no iba bien, tenía bajadas de tensión, contracciones y pinchazos. Yo pensaba que ese embarazo no iba a llegar a buen término". 

Ataques de pánico

"Los celos te están volviendo loca, vas a malparir a mi hijo", le espetaba una y otra vez Antonio David a Rocío durante el embarazo. Y es que Rociíto vivió muchos ataques de pánico a causa de las infidelidades del ex Guardia Civil.

"No quiero entrar en los problemas que David tuvo cuando nació, no me parece bien y no lo voy a hacer, solo diré que hubo que trasladarlo de hospital. Se lo llevaron al 12 de Octubre a las cinco o seis horas de nacer. Yo llamo a mi médico y pido el alta, me quería ir con el niño”, ha comenzado. 

Amantes

Antonio David Flores vino todo arreglado y me dijo que se iba a Málaga porque le daban un premio. No fue allí porque no le daban ningún premio, iría donde siempre", ha explicado Rocío haciendo referencia a cuando el ex guardia civil dejó a su hijo en el hospital por irse con su amante.

"Mi madre decía que era un ser de luz, su bombón de nata. Era como un ángel y a mí me despertaba mucha ternura, quería protegerlo, en algún momento me llegué a sentir culpable, pero con el tiempo entendí que no era así", recuerda Rocío Carrasco sobre los primeros días de vida de su hijo con el que tuvo una relación muy especial.