Miki Nadal y Carola Escámez han firmado su divorcio definitivo después de una separación muy polémica y nada amistosa. Y es que, pese a que ninguno de los dos ha contado públicamente el motivo de su ruptura, todo apunta a una supuesta infidelidad como el detonante final.
Feliz y orgulloso de la decisión que han tomado, el humorista ha utilizado su cuenta de Instagram para compartir con sus seguidores el buen momento que vive. Una felicidad fruto de haber puesto punto y final a una etapa en su vida que para nada ha acabado bien.
Miki Nadal celebra el divorcio
"La semana pasada fue una de las más tristes de mi vida, pero esta semana estoy de celebración porque he vivido uno de los momentos que más deseaba que llegase desde hace tiempo. Es hora de celebrarlo a lo grande, con un buen champán y con tod@s es@s amig@s que han estado siempre a mi lado y se alegran de las cosas buenas que me pasan... Voy a reír, voy a bailar, vivir mi vida, la, la, la , la, la...", ha escrito Miki Nadal en su red social.
Además, el portal digital de Jaleos ha publicado que la pareja mantendrá la custodia compartida de su hija, y será el cómico el que se encargue de los gastos escolares. Del mismo modo, deberá aportar un total de 1.000 euros mensuales como pensión alimenticia.
El final de una dura ruptura
Así pues, el juez ha desestimado la pensión compensatoria que pedía Carola Escámez, y los gastos extraordinarios de la pequeña serán finalmente compartidos por ambas partes. Una sentencia que pone fin a cinco años de matrimonio y a un duro proceso de separación, que empezó con una condena para Miki Nadal por un delito leve de vejaciones.
Actualmente, la pareja a dejado atrás su vida juntos y los dos se han vuelto a enamorar por separado. Mientras Carola hacía pública su historia de amor con Roberto Martín en junio de 2020, Miki comenzaba una nueva relación con la periodista y empresaria Helena Aldea, a quien conoció en septiembre del año pasado.