Prometía ser uno de los momentos estelares de la noche. Tanto es así que la organización de Supervivientes se lo ha guardado hasta pasada la medianoche, por eso de acumular más audiencia. Pero la cosa no les ha salido como esperaban. Y es que el reencuentro entre Miriam Saavedra y Carlos Lozano ha sido soso, sin ganas y nada emocionante.
El reencuentro entre Carlos Lozano y Miriam Saavedra en 'Supervivientes' / MEDIASET
La peruana, que ha viajado a la isla como fantasma del pasado, ha llegado al palafito enfundada en un disfraz de unicornio. Y el encargado de descubrir quién se encontraba debajo no ha sido otro que Carlos Lozano. Aunque, a juzgar por su reacción, no le ha hecho ni pizca de gracia, puesto que no se han intercambiado ni un triste abrazo. Una situación que no ha gustado en absoluto a Saavedra, quien ha dicho: "No esperaba este recibimiento". Y, acto seguido, ha añadido: "He venido a pasarla bien un rato. No te preocupes porque voy a dar vueltas por todas partes. Creo que deberías estar muy agradecido porque no te he hecho nada de lo que otras podrían haber hecho. He sido muy buena novia y exnovia y vengo con el mejor estado de ánimo".
Carlos Lozano se marca un 'Pantoja' y amenaza con abandonar
La visita de su expareja a Honduras ha llegado en un momento muy complicado para el presentador. Y es que Carlos Lozano se ha quejado de que la organización del concurso le tiene abandonado y no le cuidan bien. "Me habéis hecho perder la energía, ya no me quiero quedar y quiero que la gente me saque de aquí el jueves. Ya tenéis suficiente con lo que tenéis, ¿para qué queréis más?", ha reprochado Lozano al programa y a Carlos Sobera.
Carlos Lozano pierde las fuerzas a su paso por 'Supervivientes' / MEDIASET
Unas palabras a las que Carlos Sobera le ha respondido de la siguiente forma: "Nos gustas y te queremos. Eres un tipo que lo está haciendo soberbiamente bien y no te puedes venir abajo por nadie ni por nada". Sin embargo, la respuesta no ha terminado de convencer a Lozano y ha sentenciado: "Pues no se nota nada. Me habéis quitado todo, toda la ilusión que tenía. Yo ya he vivido mi momento, que ha sido maravilloso, pero ya no lo disfruto". Ante este panorama, ¿conseguirá Miriam Saavedra subirle el ánimo al presentador o terminará por hundirle en la miseria más profunda?