Este domingo 18 de marzo los rusos acuden a votar a las elecciones presidenciales, donde Vladimir Putin (65 años) parte como favorito. Dado que apenas hay competencia electoral, el candidato no tendría por qué cuidar en exceso su imagen. Sin embargo, este no es su caso, ya que se especula que se ha sometido a diversas cirugías estéticas.
De las primeras imágenes que existen del líder ruso en 1990 hasta las últimas fotografías durante la campaña presidencial, se pueden observar claramente las transformaciones en el rostro de Putin.
Relleno de las mejillas
Aunque las autoridades rusas nunca han confirmado estas informaciones, algunos expertos médicos señalan qué intervenciones se han realizado. Como el Dr. Lambe de la Clínica Reflect en Manchester que comentó al diario The Sun: "El contorno fácil de Putin ha cambiado claramente a lo largo de los años y mientras que la forma de nuestra cara puede adelgazar con la edad, el suyo es notablemente más ancho y gordo".
Una de las más evidentes es el relleno de las mejillas, que fueron bastante sutiles al comienzo, una progresión que podría explicar que "tiene un cirujano estético en su equipo". Todos estos trabajos persiguen crear una contorno "más joven y completo en los rellenos".
Imagen amigable para los rusos
El Dr. Lambe comenta que el presidente también se sometió a una sutil elevación en la parte superior del ojo junto a un probable estiramiento de la barbilla para conseguir un aspecto mucho más alerta y fresco.
Todas estas operaciones perseguían que la imagen de Putin fuera más fresca y amigable para el público. Sin embargo, el presidente de Rusia no se libra de los estragos de la edad, que ha querido eliminar a base de botox.
Demasiado botox
El relleno a base de botox de Putin en la actualidad es "demasiado y es por eso que parece mucho más obvio ahora", comenta el médico. "Muchos hombres descubren que el botox puede retrasar el reloj y se pueden volver un poco locos y administrarse demasiado en poco tiempo".
En esta misma línea, ya en 2011 Putin apareció en una reunión con un moretón alrededor de su ojo (posible resultado de la inyección). Fue tal el revuelo que surgió que el portavoz del líder político tuvo que salir a negar las informaciones. "Probablemente se debe solo a cómo cayó la luz. El primer ministro está cansado", comentaba el representante. No obstante, entrevistas posteriores a diversos cirujanos confirmaron las informaciones que hablaban de una operación estética.
Últimos retoques
Su última aparición tampoco se ha librado de la polémica y son muchos los que han llamado la atención sobre su rostro. El presidente de Rusia lucía mucho más joven, con una cara donde predominaban las formas redondeadas. Las mejillas eran mucho más prominentes, mientras que en la zona de la frente y del contorno de los ojos no se podía ver ni una sola arruga. Tampoco tenía las clásicas ojeras o bolsas que suelen surgir en la parte inferior.