Plato de uno de los restaurantes de Vilafranca del Penedés / LE BORINOT

Plato de uno de los restaurantes de Vilafranca del Penedés / LE BORINOT

Estilo

Vilafranca del Penedés desde el plato

Pequeña guía con los restaurantes y espacios culinarios para probar los mejores productos de la zona (también espumosos)

24 agosto, 2021 00:00

Tradición, viña y vino. Este sería el mantra para presentar la villa centenaria de Vilafranca del Penedès (Barcelona), una localidad que en sus 19,7 kilómetros cuadrados alberga una de las tradiciones catalanas más exportadas. Es el lugar de donde salen algunos de los mejores cavas del mundo y ofrece también productos de proximidad que ahora se reivindican. 

Las bodegas son el patrimonio más destacado del municipio y muchos de los productores locales promueven propuestas turísticas locales. Las visitas guiadas a las bodegas resultan indispensables al acercarse a esta zona. Más allá de las rutas entre viñas, Vilafranca del Penedès ofrece otra serie de lugares para descubrirla también desde el plato. 

Visita histórica

En cuanto al recorrido histórico, el punto de partida para recorrer el casco histórico de la ciudad es la Basílica de Santa María, situada en la plaza Jaume I. Se debe pasar por el Palacio Real, donde murió Pedro III el Grande y que hoy acoge la sede del museo de las culturas del vino de Cataluña; la bella arquitectura del Palacio Baltá o el claustro de Sant Francesc (lo único que queda ya del antiguo convento de los franciscanos de Vilafranca) son otros de los puntos más fotografiados.

En las afueras del municipio, otra de las visitas imprescindibles es el yacimiento arqueológico de la Olérdola. Permite contemplar restos íberos, romanos y medievales en el interior de este mágico recinto amurallado. Al final de la visita, es recomendable sentarse en alguna de estas mesas.