Distribuidos a lo largo de diferentes puntos dentro del territorio español, son muchos los lugares que hace décadas estaban llenos de vida y que el paso de los años los ha destinado al más profundo olvido.
Un recorrido en busca de algunos de los rincones que se reparten en el interior de nuestras fronteras cuya visita es una obligación por la belleza que desprenden.
Castillo Torre Salvana
El castillo Torre Salvana fue una fortaleza que se construyó en el Siglo X en la Colonia Güell, en Santa Coloma de Cervelló, en la provincia de Barcelona. Cuya característica principal es la torre de defensa de su estructura, que tenía como objetivo proteger a la construcción de los ataques enemigos.
Desde el año 1715 este castillo quedó abandonado y hoy en día es uno de los referentes del ámbito del misterio en nuestro país, por la gran cantidad de leyendas que versan en torno a su historia. Rodeado de naturaleza, conforma un espacio muy atractivo para visitar.
Monasterio de San Jerónimo de Guisando
El Monasterio de San Jerónimo de Guisando, en Álava, fue uno de los primeros monasterios que se fundaron en la Península Ibérica por la orden de los Jerónimos. Su construcción data del año 1375 y se sitúa en el municipio de El Tiemblo, en un lugar aislado y repleto de vegetación.
A lo largo de su historia, este espacio sufrió hasta un total de tres incendios, siendo el último en el Siglo XX y el motivo por el que se decidió abandonar por completo. Su visita es especialmente recomendada para todos los amantes de la fotografía, por la gran cantidad de instantáneas únicas que se pueden disfrutar en su interior. Todas las visitas se celebran los miércoles y los viernes y es necesario reservar con antelación, quedando prohibida la entrada libre.
Estación de tren de Canfranc, Huesca
Inaugurada en el año 1928, la Estación Internacional de Canfranc fue declarada Bien de Interés Cultural, quedando oficialmente proclamada monumento, en el año 2002. Fue a partir del año 1970 cuando, tras el derrumbamiento del puente de L'Estanguet, comenzó a cesar su actividad de manera progresiva.
Actualmente es propiedad del gobierno de Aragón, que realiza visitas guiadas en su interior, al mismo tiempo que la restaura para habilitar parte de sus instalaciones como un hotel.