El rosetón de la Catedral de León se encuentra inmerso en diferentes labores de restauración llevadas a cabo por un taller aledaño a la catedral, con el objetivo de que pueda lucir en el mejor estado posible de cara a las próximas Navidades.
Han sido precisamente los encargados de llevar a cabo esta restauración, las personas que han alertado sobre las diferencias encontradas en la restauración que se llevó a cabo en el año 1982, en la ciudad de Barcelona, realizadas por el conocido estudio Rigalt. Uno de los aspectos que más ha llamado la atención ha sido el emplomado, que en palabras de Mario González, el administrador del templo leonés, "ha tenido que ser sustituido porque era de muy mala calidad".
Un posible cambiazo
El mismo González ha alertado sobre la posibilidad de que el rosetón haya sufrido un cambiazo en algunas de sus piezas. "Tenemos algún dibujo que parece ser que no coincide lo que se llevó con lo que vino", tal y como ha afirmado el propio responsable. Las dudas que ha generado su autenticidad han provocado que, actualmente, se estén realizando diferentes estudios a lo largo de toda la pieza. Con el objetivo de analizar lo ocurrido.
Hasta que se terminen estas labores, González ha querido tranquilizar a los diferentes organismos que han mostrado su preocupación, añadiendo que es posible que determinadas partes del propio rosetón fueran cambiadas con el objetivo de cuidar al máximo su restauración. Sin embargo, todavía queda esperar los resultados finales para conocer exactamente qué ha podido suceder.
Restaurado al 70%
Todavía no se sabe si el rosetón estará listo para lucir durante las próximas novedades. Al menos en su totalidad. Sin embargo, "ya han sido restauradas el 70% de las 97 piezas que suponen cerca de 30 metros cuadrados de vidriera", afirma González. Por lo que parece que es cuestión de tiempo que pueda volver a lucir en un breve lapso de tiempo.
Toda la inversión ha corrido a cuenta de la Fundación Cepa y ha tenido un coste total de 390.000 euros.