Cada año, los enamorados tienen una cita el 14 de febrero. La fecha elegida para la celebración del amor se debe al día del fallecimiento de San Valentín, un sacerdote del siglo III que se enfrentó al emperador de Roma, Claudio II, oficiando matrimonios en secreto entre jóvenes enamorados. Fue encarcelado y desde entonces se convirtió en un símbolo del amor.
Existen muchas formas de festejar este día y el límite solo lo pone la imaginación y el presupuesto que se pueda destinar a ellos. Una cena en la ciudad, una escapada a la playa, una actividad de ocio original e incluso un tratamiento de belleza en pareja son algunas de las ideas que se pueden llevar a cabo en este día tan especial que, además, en 2020 cae en viernes (lo que, además, favorece la visita a otros municipios).
Cenas de San Valentín en Catalunya
Salir a cenar un viernes por la noche es una de las aficiones de muchas parejas, pero hacerlo en el día de San Valentín es aún más especial. Por eso, lo ideal es elegir un restaurante que esté a la altura de la ocasión. Para este día, el japonés Koy Shunka (Barcelona) ofrece menú degustación en la cena y, para aquellos que prefieran algo mas mediterránea, el Acces (Barcelona) puede ser una opción a tener en cuenta. Sobre todo para los que quieran alargar la noche con unos cócteles.
El restaurante Celeste (Cadaqués) es una propuesta más económica con el encanto de la bella Italia. Para quien busque opciones vegetarianas, El Vergel (Tarragona) es uno de los restaurantes más conocidos de Cataluña. Algo más tradicional, con producto local y una elaboración exquisita, es Restaurant Ferreruela (Lleida) pero para una noche inolvidable siempre quedará el Celler de Can Roca (Girona), un lugar distinguido dirigido por los hermanos Roca y centrado en la alta cocina.

Escapadas de fin de semana
Quienes deseen pasar el día o el fin de semana de San Valentín en una ciudad cercana, Cataluña es el lugar perfecto. Hay opciones tanto para quienes deseen sierra, como mar, núcleos urbanos, cultura o historia. Barcelona es sinónimo de diversión y múltiples opciones para disfrutar de un aire cosmopolita, aunque para perderse por calles con mucho encanto, cultura e historia, Tarragona es una idílica opción.
. Una opción marítima, en un entorno más tranquilo y con el encanto de los pueblos costeros es Tossa de Mar (Girona).
La opción de montaña y naturaleza, en un paraje idílico la pone el Parc Nacional d’Aigüestortes i Estany de Sant Maurici (Lleida), el único parque nacional de Cataluña. Vall d'Aran (Lleida) es, sin duda, otro de los lugares con más encanto de la comunidad autónoma. El Parque Natural de Montseny (Barcelona), catalogado como Reserva de la Biosfera, es otro hermoso paraje.
Ocio para todos los gustos
Nada mejor que celebrar el amor en pareja que hacerlo con una actividad en la que reír, relajarse, hacer equipo o simplemente pasar un rato agradable. Girona es una de las provincias con mejores balnearios, por ejemplo, el Balneario Vichy Catalán para presupuestos más modestos o el Peralada Wine Spa & Golf. Otra de las actividades más clásicas y divertidas es una cata de vinos en el Penedés, una comarca ubicada entre Barcelona y Tarragona y con estupendos viñedos y bodegas.
Los más originales pueden disfrutar de un día de realidad virtual en Zero Latency (Barcelona), de un escape room para parejas en Lostroom (Barcelona) o de una sesión de tiro con hacha en Axe Throwing (Barcelona). Por último, la clásica opción de cine es una apuesta segura que nunca falla, aunque es imprescindible escoger una película que guste a los dos por igual para que ambos disfruten de esta noche tan especial.