El mundo del turismo rural ya no es lo que era. Antes eran muy pocas casas las que se habría al público que tenía ganas de desconectar de la vida urbana, ahora ya hay casas rurales de lujo.
Se cuentan ya por decenas en todo el territorio catalán. Si bien es cierto que para algunos una casa rural de lujo debe parecerse al máximo a una vida en el campo, otros quieren lo mismo que un hotel de cinco de estrellas en medio de un paisaje bucólico. Para ellos han nacido espacios como la Masia Can Canyes.
Casa rural con historia
En el papel esta masia tiene un nombre menos catalán, o igual de catalán, pero con un remate inglés, Masia Can Canyes & spa. Con esta carta de presentación, uno ya puede deducir que no la parte nostrada sirve para subir el precio de la noche.
Tal vez la frase es prejuiciosa. El aspecto de esta casa rural es exactamente el que uno espera de una casa típica catalana de pueblo. Más alargada que alta (sólo tiene dos plantas), esta masia de casi tres siglos de antigüedad mantiene su estructura original y un interior adaptado a sus nuevos usos.
Habitaciones de lujo
La estructura de piedra sólo queda a nivel decorativo en espacios como la bodega y algunas habitaciones. La fachada está revestida de un blanco inmaculado que contrasta con las marrones ventanas de madera de las estancias.
En total tiene ocho habitaciones y un apartamento, todas ellas con un estilo que combina lo rústico con una decoración cuidada al detalle y todos los lujos que uno encuentra en cualquier hotel de cinco estrellas. No sólo cuentan con la tele y wifi sino que algunos cuentan con bañera y columna de hidromasaje y un desayuno tipo buffet incluido.
Y un buen vino
Pero que no se preocupen los que no opten por la mejor suite, las habitaciones son amplias a más no poder y el hotel cuenta con una serie de servicios que no se encuentran en la mayoría de hoteles de Barcelona. Desde servicio de masajes relajantes a drenajes linfáticos, pasando por unos paquetes enogastronómicos que harán las delicias de los amantes del vino.
Y realmente no puede haber un lugar más idílico para ello. Aprovechando la ubicación de Can Canyes, en Sant Llorenç d’Hortons, en medio del Penedès, no hay nada más romántico y apropiado que aprovechar los beneficios y propiedades del vino.
Cómo llegar
Y si sólo se quiere descansar, uno puede pasear entre viñedos o disfrutar de la piscina y el jardín de esta casa rural que hará las delicias de los bon vivant.
Llegar allí no es difícil. Tanto desde Tarragona como Barcelona, lo único que debe hacerse es ir por la AP-7 hasta la salida de Gelida y tomar la carretera BV-2249 y seguir las indicaciones hasta Sant Llorenç y, antes de entrar al pueblo, ir en dirección al hotel.