Una mujer de 83 años lleva varias semanas ingresada en un hospital de Rasueros (Ávila) donde se recupera de una operación de urgencia por una peritonitis. No obstante, los médicos confundieron sus síntomas con una gripe por el facultativo que la atendió de forma telefónica.

Al parecer, la mujer se empezó a encontrar mal un domingo y al día siguiente llamó a su centro de salud para pedir cita presencial con el médico, pero le dijeron que la atenderían telefónicamente. Cuando lo hicieron, le diagnosticaron una gripe por sus síntomas y le recetaron paracetamol y que bebiera mucha agua.

Denuncian la falta de personal

Sin embargo, su familia tuvo que llevarla de urgencias al hospital horas después al ver que su estado empeoraba por momentos. En el Hospital de Medina del Campo los médicos les dijeron que "venía con una peritonitis y que tenía prácticamente infectado todo", por lo que entró inmediatamente en quirófano. 

Andrés Rodríguez, portavoz del PSOE en dicho municipio, ha denunciado públicamente este caso que, como muchos otros, suceden en estas zonas del medio rural, ya que supone grandes dificultades para la población envejecida. Rodríguez considera que la falta de transporte sanitario hace que los enfermos dependen de la buena voluntad de sus vecinos.