Mallorca ha sido escenario de la penúltima hazaña etílica protagonizada por turistas. En este caso, alemanes. El pasado 9 de agosto, alrededor de las 10.30 horas, un grupo jóvenes alemanes acudió al bar Bamboleo, en la playa de Palma de Mallorca, donde pidieron 600 cervezas. A palo seco, sin comida. La factura de la melopea matinal ascedió a 1.260 euros ya que cada unidad costó 2,10 euros. Teniendo en cuenta que el grupo estaba compuesto por unas quince personas, se deduce que cada una se bebió unas 40 cervezas.

Factura de los 600 botellines de cerveza consumido por un grupo de alemanes / INSTAGRAM

Uno de los asistentes, Helmut Bester Mann, ha inmortalizado el momentazo veraniego de esta quincena de beodos en su perfil de Instagram. La imagen de sus colegas sentados en la mesa que está repleta de vasos y de la factura dan fe de ese desafío al récord Guiness de ingesta.

Con clientes así ¿qué establecimiento no hace su agosto?