Podría parecer que los pitbulls y los pastores alemanes son las razas de perros más fuertes y peligrosas para humanos y otros animales. No obstante, esta creencia está muy alejada de la realidad. El can más poderoso es el mastín tibetano.
Aunque tengan una apariencia adorable, el también conocido como dogo del Tíbet puede ser peligroso ya que tiene un físico imponente y majestuoso, además de una mandíbula fuerte que le permite mordidas más consistentes que las de otros perros.
Muy peligrosos
Esta raza tiene cierto parecido a un oso y un león y, a lo largo de su historia, su trabajo era proteger los templos tibetanos en el Himalaya. Asimismo, esta clase de can también requiere unos cuidados específicos por parte de sus dueños que hace que muy pocos los tengan.
En sus primeros años de vida, estos animales necesitan una dieta rica en proteínas y nutrientes para que crezcan sin problemas articulares y óseos. Por otro lado, el pelaje de los mastines tibetanos requiere muchos cuidados, ya que es abundante y largo.
Entrenamiento
Además, en sus primeros años también tienen que ser entrenados y deben socializar con otros perros para que no se vuelvan peligrosos, estén bien educados y sean amigables con el resto de mascotas y con las personas.
Finalmente, esta raza de perro necesita un entrenamiento diario para ejercitar sus músculos, ya sea con un paseo tranquilo o algo más intenso como la natación. Esto favorece a su comportamiento y permite que esté saludable siempre.