Uno ya sabe de antemano cuando elige un destino muy turístico, sobre todo en los meses de verano, como puede ser Barcelona que no sería raro que esa misma idea de destino la hayan tenido miles de miles de personas más. Es entonces cuando puede resultar complicado visitar algunos monumentos, ir a una playa y reservar restaurante debido a la gran afluencia de personas. Hasta ahora, ya que existe una aplicación que puede ayudar a la hora de evitar esas aglomeraciones en una ciudad como la capital catalana.
Check Barcelona es el nombre de esta herramienta digital gratuita y para todos los dispositivos que informa en tiempo real, tanto a los turistas como a las personas que residen de manera permanente en la ciudad, de la afluencia que pueda haber en ciertos espacios como museos, monumentos, atracciones turísticas o playas incluso. Una idea para no darse la vuelta al ver tanta gente, evitar las masificaciones (sobre todo con la situación actual) y garantizar la perfecta convivencia entre vecinos y forasteros.
Una buena idea
Esta iniciativa novedosa de carácter tecnológico ha sido obra del mismo Ayuntamiento de Barcelona que junto con Eurecat Centro Tecnológico han puesto en marcha esta aplicación pionera en toda Europa, hasta ahora no existía nada similar, para controlar el volumen de visitantes en un determinado momento y lugar. Una idea que cobra mayor sentido en la situación actual y donde se permite favorecer la seguridad de los turistas, al mismo tiempo que se mejora su experiencia turística.
Además de esta información puntual para evitar masificaciones, Check Barcelona ofrece puntualmente contenido sobre la oferta cultural de la ciudad, así como de la red de transportes (y cuántas personas lo usan a lo largo del día) y los aparcamientos cercanos que existen. En total, en esta aplicación digital se puede consultar la ocupación de 280 espacios donde se concentra la mayor parte de los atractivos turísticos de la capital, así como alternativas cercanas y similares para esos momentos de espera y si el lugar elegido está saturado de gente.
Más funcionalidades
Pero no acaban aquí las bondades de esta herramienta tecnológica. Una vez descargada Check Barcelona en el teléfono móvil, el usuario podrá incluso comprar entradas de un monumento o un museo de manera anticipada (y evitarse las molestas y largas colas delante de la taquilla). Además, si la idea es alejarse por un día de la capital, en esta plataforma también se pueden consultar otros atractivos de los alrededores; como por ejemplo, acercarse hasta Vilafranca del Penedés o Sant Sadurní d'Anoia para visitar alguna bodega y conocer su rico patrimonio vinícola.
Como recordaron los responsables del consistorio barcelonés en la presentación de este novedoso dispositivo, la idea es que esta aplicación se vaya mejorando y ampliando con la incorporación de nuevos espacios y equipamientos de la ciudad; además de facilitar un mapa donde se pueda controlar el aforo de personas en una vía pública.
Espacio de salud
Entre la amplia información que se puede consultar a través de este entorno online, también hay un espacio dedicado a la salud con los teléfonos de emergencia que son útiles en caso de necesitarlos y consejos para moverse por la ciudad o hacer esas visitas turísticas de la forma más segura: recomendaciones en restaurantes y comercios, restricciones vigentes, limitaciones en los encuentros sociales, ocio nocturno o la asistencia a actos religiosos.
Aparte, si uno quiere conocer Barcelona de una forma más sostenible, nada como hacerlo a pie, en bicicleta o usando el transporte público. Esta plataforma también sirve de guía para indicar los lugares en los que se localizan los carriles bici o las zonas mejor señalizadas y adaptadas para el paso de los peatones.
Barcelona, destino turístico
Los últimos datos que se tienen, obviando el pasado año en plena pandemia por el Covid-19, acerca de la ocupación turística de una ciudad como Barcelona hablan de una cifra histórica de visitantes: casi 12 millones de personas se acercaron a contemplar las maravillas de la capital catalana. Un número que suponía un incremento del 5% en relación a los datos obtenidos en 2018 y que traducido en pernoctaciones en establecimientos hoteleros y apartamentos supera la cifra de 30 millones.
Aparte de su reclamo monumental o gastronómico, uno de los platos fuertes de la ciudad son sus playas y sus vistas al Mar Mediterráneo. Así, según datos del Institut d’Estudis Regionals i Metropolitans, los arenales de la zona metropolitana reciben de media cada año unos 10 millones de visitantes que se gastan 60 millones de euros durante su estancia en la ciudad, especialmente en servicios como la restauración, el comercio o el aparcamiento para poder disfrutar del perfecto día de playa.