El sector del automóvil se encuentra en los albores de la llegada masiva de los coches eléctricos y eso supone un torrente de noticias y rumores que pueden incluso afectar a las acciones en Bolsa de unas compañías y otras.
Una de las novedades más destacadas es la intención de Apple de crear sus propios automóviles eléctricos próximamente, y como todo lo que hace la compañía que preside Tim Cook, ha generado una gran expectación.
El Proyecto Titán
Este es el enigmático nombre en clave que la marca de la manzana mordida puso en marcha hace siete años y que ha pasado más o menos inadvertido hasta que se han producido supuestas filtraciones sobre un lanzamiento cercano y acerca de las novedosas tecnologías que incorporarán los nuevos vehículos.
Y es que nadie duda de que los coches que fabrique Apple tendrán las dos características propias de sus productos electrónicos: un diseño muy cuidado y las tecnologías más disruptivas. Una de ellas será un avanzado sistema de conducción autónoma basado en los sensores LiDAR que ya se han visto en los iPhone 12 Pro Max.
Tecnología punta
Eso no es todo, de acuerdo con los rumores que surgen tanto de la compañía como de diversos analistas del mercado automovilístico, los nuevos coches eléctricos de Apple incorporarán baterías de litio-ferrofosfato, las cuales se sobrecalientan menos, lo que las hace generalmente más seguras que las baterías de iones de litio.
Asimismo, las baterías podrían presentar un diseño de monoceldas, o lo que es lo mismo, un diseño en el que hay espacio para una mayor cantidad de material activo que haría posible una mayor autonomía.
¿Cuándo llegará el primer coche Apple?
Responder a esta pregunta solo está en manos de Tim Cook y su equipo, ya que hay un absoluto secretismo alrededor del proyecto. Así pues, cualquier fecha de lanzamiento es fruto de la especulación. Por un lado, hay fuentes que apuntan que Apple estaría en disposición de presentar su primer prototipo este mismo año, ya que encontrar un fabricante con el que aliarse para manufacturar los automóviles no le sería complicado.
Sin embargo, hay quienes consideran que el lanzamiento de los primeros coches no se producirá hasta dentro de cuatro años, ya que son muchos los aspectos que la compañía creada por Steve Jobs aún tiene que acometer.
Elon Musk lo tiene claro
Quien tiene claro que Apple está poniendo toda la carne en el asador para el desarrollo de automóviles eléctricos es Elon Musk, creador de Tesla y uno de los hombres más ricos del mundo, quien no solo considera que es un secreto a voces, sino que además ha apuntado que les están “robando” ingenieros.
Al parecer, Apple estaría fichando a numerosos especialistas de la propia Tesla para que el proyecto avance con mayor velocidad. Y aunque no parece ser algo que pudiera agradar a un magnate como Musk, considera que la llegada de nuevas compañías es beneficioso para la industria.
El coche eléctrico Tesla Model 3 / TESLA
El nombre de Apple impresiona
Por ahora, Tesla seguirá trabajando en el desarrollo de vehículos eléctricos de todo tipo como hasta el momento (incluyendo los modelos con conducción autónoma), pero también es cierto que los rumores sobre el próximo aterrizaje de Apple está afectando de un modo u otro a la compañía de Musk y a otros competidores.
De hecho, la simple posibilidad de que la compañía de la manzana presente un nuevo coche eléctrico ha provocado que las acciones crecieran un 3%. Y eso que solo era un rumor. Por el contrario, las de Tesla cayeron en ese mismo momento un 1,5%.
Un antes y un después
En los medios especializados han aparecido fuentes apuntando que el coche que presente Apple va a marcar un antes y un después en la industria automovilística, la cual podría cambiar en los próximos años con la llegada de nuevas compañías que habitualmente no estaban presentes.
Además de que Tesla sea el dominador mundial -al menos publicitariamente lo es-, el hecho de que un fabricante tecnológico pueda llevar sus modelos de producción al sector de la automoción puede poner en jaque a los grandes fabricantes. No en vano, nombres tan poderosos como Volkswagen o Toyota miran de reojo a estas nuevas incorporaciones que puedan arrebatarles un mercado que comienza ahora a desarrollarse, como es el de los coches eléctricos.