La última noche del año tiene algunos elementos que se han convertido en clásicos en numerosos hogares españoles. Más allá de una cena exquisita o de las doce uvas a medianoche, la televisión se ha convertido en una compañera más, tal y como atestigua el interés que suscita el anuncio de quiénes serán los presentadores de las campanadas que dan la bienvenida al nuevo año.
Justo antes de que esto suceda, desde 1988 se ha venido repitiendo un formato humorístico en Televisión Española en el que han participado los humoristas más emblemáticos, quienes no han dudado en sacar lo mejor de su repertorio para despedir el año con risas.
Especiales de humor en Nochevieja
Eso sí, cabe señalar que aunque estos especiales comenzaron a finales de los años 80, antes ya se habían vivido algunos grandes momentos en las galas de Año Nuevo que aún a día de hoy siguen amenizando a mucha gente a partir de las doce de la noche.
Ese fue el caso del programa que daba la bienvenida a 1986, en el que el dúo Martes y Trece protagonizaron el sketch de Encarna de Noche y las empanadillas de Móstoles. Tal fue su repercusión que desde finales de los 80 hasta principios de los 90, Millán Salcedo y Josema Yuste fueron los protagonistas de la última noche del año, ya fuera durante la gala general o en los nuevos espacios de humor que precedían a las uvas.
Javier Gurruchaga, el pionero
No obstante, el mítico dúo no fue el primero en hacer un programa humorístico precampanadas, sino que ese honor recayó en el showman, cantante y presentador Javier Gurruchaga, que había triunfado durante el año 1988 con su programa de variedades Viaje con nosotros, en el que había mucho espacio para las risas.
Así que el artista donostiarra fue el elegido para conducir La última cena... del 88, en la que sería su primera y última incursión en estos espacios que se han convertido en un habitual de la primera cadena pública.
Martes y Trece sientan las bases
Al año siguiente, el turno fue para Martes y Trece, por entonces en lo más alto del escalafón humorístico nacional. Ellos proponían un humor más moderno, que bebía de los grandes clásicos pero que optaba por la sátira, las imitaciones y por un absurdo que calaba entre la audiencia.
Fue tal el éxito de su formato en el que sucedían los skectches que aún a día de hoy se sigue empleando. Su primer programa se tituló A por uvas, y durante cuatro años consecutivos fueron los dueños de la última cena del año con actuaciones desternillantes que después se repetían por todos los rincones de España. Quizás las nuevas generaciones que los ven en la actualidad no se expliquen cuál era el secreto de su éxito, pero todo se debe a que los tiempos cambian y los gustos también.
Cruz y Raya, de intermedio a fijos
En el año 1993 Televisión Española confió en un nuevo dúo que llevaba algunos años despuntando: Los Morancos. Con todo, la gala de Fin de Año fue para Juan Muñoz y José Mota, que proponían un humor muy fresco, con imitaciones menos “humillantes” y con una puesta en escena muy trabajada. Con Este año, Cruz y Raya... ¡seguro! llegaron a muchos más espectadores y eso les terminó de catapultar.
Tras el 93, Martes y Trece continuaron siendo los dueños de la Nochevieja, con cuatro programas consecutivos, hasta que en 1997 se separan definitivamente con la gala Adós, que logró casi un 50% de cuota de pantalla.
Una nueva época
Esta separación dejó el camino libre a nuevos rostros. En 1998 el turno fue para otro de los dúos míticos del humor en nuestro país: Los Morancos de Triana (o simplemente Los Morancos). Los hermanos Jorge Y César Cadaval ya se encontraban entre los más populares de la televisión, de modo que TVE aprovechó el tirón para que sustituyeran a Josema y Millán. No obstante, solo se encargaron un año y no volverían a repetir hasta 2013 con La puerta del tiempo.
Los que sí repitieron una y otra vez fueron Cruz y Raya primero y José Mota en solitario después, ya que el humorista manchego se ha convertido con el paso de los años en el más prolífico en lo que a dar una última noche de humor se refiere.
Mota reina
De hecho, el dúo se encargó de dar su toque entre 1999 y 2006, ya que en el año 2007 separaron sus caminos profesionales. Claro que Mota siguió su carrera en solitario, convirtiéndose en el humorista de cabecera de RTVE.
No en vano, aparte de sus programas, se ha encargado de todas las cenas de Nochevieja entre 2007 y 2020, con la salvedad de la de 2012, que corrió a cargo de Josema Yuste, y de la citada de 2013 que tuvo como protagonistas a Los Morancos. ¿Hace eso del artista manchego el mejor humorista de este tipo de galas? Eso es algo que solo la audiencia puede responder.