La pandemia obligó a pasar una primavera entera en reclusión, estado de alarma y desescalada. Los españoles han pasado un verano pendiente de las restricciones de los diferentes territorios y ya se está pensando en cómo será la Navidad.
La viróloga del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) Margarita del Val ha advertido de que las fiestas de diciembre pueden quedar muy restringidas si la transmisión del Covid-19 sigue los niveles actuales.
Entrevista a Margarita del Val / CADENA SER
Vacuna
“Hasta que no llegue la vacuna, nada será igual”, recuerda. El Gobierno español anunció que dispondría de 3.000.000 dosis de la vacuna de Oxford, pero incluso así la Organización Mundial de la Salud (OMS) ya avanza que la vacuna definitiva es difícil que llegue a estar lista antes del 2022.
Unas palabras que parece compartir Del Val. La pandemia no es local, sino que hasta que la pandemia no esté controlada en todo el mundo no se puede dar por vencida. “Si controlamos el virus aquí y en África no, vamos a ver aún como más apestados a los inmigrantes. África es hoy un agujero negro. No sabemos qué pasa. No se diagnostica, no se informa”, indica.
Reuniones y cenas
La viróloga afirma que “podremos sacar el champán de verdad cuando podamos tratar a los africanos que vienen aquí igual de mal que ahora, pero no como apestados porque vengan con el virus”.
En este sentido, la experta, al ser preguntada por si sería posible ir de fiesta por Navidades y reservar un cotillón para Nochevieja, tiene clara la respuesta: “Si fueras amiga te diría que mejor no. Que nos juntemos un grupo muy pequeño en casa, que nos lo vamos a pasar igual de bien”.
Negacionistas y Bosé
Hasta que no se disponga de la vacuna, la profesional del CSIC llama a la concienciación y responsabilidad de las familias, a quien reclama prudencia a la hora de reunirse. Un colectivo, junto con las amistades, determinantes si se quiere contener la pandemia, sostiene.
Sobre los negacionistas como Miguel Bosé, Del Val se muestra muy crítica. “No sé ni cómo se lo pueden creer ellos mismos. Es gente educada que se cree más lista que el establishment. Creo que tienen miedo y lo sacan por ahí”, concluye.