Son muchas las supersticiones en el mundo del juego. Una de ellas es la de apostar a los números que uno pueda ver en sus sueños. Normalmente no toca, pero hay excepciones.
Esto es lo que le pasó a Deborah Rose, una mujer jubilada de 64 años y vecina de Ontario (Canada), que ha conseguido hacerse con el premio gordo, apostando a los números que vio “en un sueño”.
Tenacidad
La afortunada ganó la lotería el pasado 28 de julio, pero ha esperado casi un mes en ir a recoger el premio: un millón de dólares.
Rose reconoce que los números los vio en un sueño que tuvo hace mucho tiempo y, después de apostar siempre a los mismos durante años, por fin ha tenido éxito.
Familia y viajes
El dinero además le vino como caído del cielo cuando "no estaba teniendo un buen día". Hasta que salieron los números afortunados en el sorteo.
Tras conocer la noticia, compartió la buena nueva con sus hijos y sus nietos, con quienes compartirá parte de sus ganancias. Eso sí, también va a permitirse cumplir sus deseos de viajar por el mundo. "Tengo muchas ganas de visitar Grecia, Turquía y Bulgaria".