El lugar de celebración del banquete de la boda es un aspecto muy importante, una decisión que no se debe tomar a la ligera cuando se quiere disfrutar de un día inolvidable. Por suerte, en Cataluña hay muchas opciones muy interesantes. Concretamente, para quienes busquen salones de boda en Lleida, los paisajes cobran especial protagonismo y se pueden encontrar lugares espectaculares donde sorprender a los invitados y vivir la boda de cuento que los novios siempre han imaginado desde que comenzaron este sueño.
Masías, fincas rústicas, jardines con piscinas e incluso castillos son algunas de las opciones de salones de boda en Lleida provincia para aquellos que deseen una alternativa a los típicos salones de boda, demasiado fríos y formales para su estilo de boda deseada. Masía Farré, con 20.000 metros cuadrados de terreno, Els Comdals, con construcciones en piedra y unos jardines preciosos, o el Palau de Margalef, un espectacular castillo del siglo XVIII son algunas de las opciones que se proponen a continuación.
Masía Farré
Las masías son un excelente lugar para celebrar una boda de ensueño. Ofrecen el espacio suficiente para hacer desde ceremonias íntimas hasta otras mucho más multitudinarias. En concreto, Masía Farré data del siglo XIX, cuenta con 20.000 metros cuadrados y terreno y ofrece celebraciones de entre 30 y 350 invitados. Rodeado de un entorno rural, cuenta con tres jardines diferentes para quienes deseen celebrar la ceremonia en uno, el banquete en otro y la fiesta en un tercero.
La ventaja de este tipo de lugares para celebrar una boda es que permite a los novios personalizar todo, decorar a su gusto cada espacio y tener el pleno control sobre las decisiones de cátering, decoración, ambientes, servicios para los invitados… Al tratarse de un espacio al aire libre, se recomienda especialmente para celebraciones estivales. Se localiza en Plana de Boldú, C-53, Km 128 (La Fuliola), a solo 10 minutos de la A-2, por lo que es fácil llegar hasta el lugar.
El Comdals
En la comarca de La Segarra se encuentra uno de los lugares para celebrar bodas más bonitos de toda la provincia. Se trata de Els Comdals, una finca rodeada de naturaleza con diferentes espacios para poder acoger todo tipo de bodas (hasta 300 invitados), capilla para oficiar la ceremonia y jardines para disfrutar de la magia de los enlaces al aire libre. Además, ofrecen un buen surtido de servicios para que los novios no tengan que preocuparse de nada (cátering, decoración, música y cualquier otro deseo que tengan los protagonistas de este día).
Esta finca fue propiedad del Monasterio de Montserrat y residencia del Padre Abat. Construida entre los siglos XIV y XVIII, conserva su estilo gótico a pesar de las reformas que ha sufrido a lo largo de los años para garantizar su perfecta conservación en la actualidad. Se encuentra a una hora de Barcelona y a tan solo 45 minutos de Lleida capital, concretamente en la Nacional II (Cervera). También ofrece alojamiento para hasta 19 personas que deseen pernoctar aquí y no preocuparse por coger el coche de vuelta a la ciudad si conducir puede suponer un problema.
Palau de Margalef
Pero si se habla de espectacularidad, este es, posiblemente, el salón de bodas de Lleida más impresionante de la provincia. Se trata del Palau de Margalef, una impresionante construcción del siglo XVIII con capacidad para 350 invitados y unos jardines maravillosos. Fue la residencia de los duques de Almenara e incluso hoy en día está todo cuidado a la perfección, manteniendo su esencia. En sus jardines destaca el pozo y el lago, además de otros rincones muy bellos para disfrutar del enlace y conseguir fotografías espectaculares del feliz día.
Se puede celebrar la ceremonia al aire libre, si el clima lo permite, o en caso contrario optar por la carpa con ventanales al jardín. Los responsables de este lugar se encargarán de todo lo que los novios necesiten (cátering, decoración, música… incluso fuegos artificiales). El menú, aunque se puede personalizar, apuesta principalmente por cocina tradicional mediterránea con toques innovadores. Se encuentra en la carretera de Tarragona, kilómetro 79 (Torregrossa), en la provincia de Lleida.