Hay ciertos elementos que definen las características propias de una determinada población o territorio. La gastronomía representa una de las principales. La comida elaborada con los productos típicos de la zona define el sabor de un lugar concreto. El patrimonio histórico que albergan las ciudades y localidades es motivo suficiente para diferenciarse con el resto. El otro punto reside en las fiestas y costumbres de cada territorio. En el caso de Cataluña se pueden destacar unas cuantas.
Y es que la comunidad autónoma cuenta con una destacada variedad de celebraciones. Algunas de ámbito local y otras que se realizan a lo largo de las tres provincias. Estas fechas señaladas en el calendario introducen un denominador común entre todos los catalanes, que salen a la calle para disfrutar de sus fiestas más tradicionales. Muchas de ellas traspasan las fronteras, mientras que otras aún siguen siendo desconocidas para ciertos sectores de la población.
El San Valentín de Cataluña
Sant Jordi representa uno de los clásicos días de celebración en Cataluña. Las rosas y los libros se convierten en los principales protagonistas del 23 de abril de cada año. Esta festividad conmemora la victoria de San Jordi sobre el dragón a las puertas de la muralla de Montblanc, municipio de Tarragona. La leyenda cuenta que tras finalizar la hazaña, de la sangre del dragón nació un rosal, de ahí que este tipo de flor sea uno de los principales obsequios.
La festividad de Sant Jordi también cuenta con unas connotaciones de amor. Sant Jordi derrotó al dragón para salvar a la princesa y a los ciudadanos que se encontraban encerrados en el interior del pueblo. El caballero regaló una de las rosas, emanadas de la sangre del dragón, a la princesa del pueblo que había rescatado. Aragón es otra de las comunidades autónomas que celebra esta fiesta del día 23 de abril.
Las llamas toman las riendas
Para explicar la naturaleza siempre se han utilizado los cuatro elementos básicos de tierra, aire, agua y fuego. Todos se encuentran bien representados a lo largo del territorio catalán. El agua con el mar mediterráneo, ríos y valles fluviales, el aire con el viento de la tramuntana, la tierra con los grandes baldíos para la producción de alimentos y el fuego en dos de las fiestas populares más importantes de la comunidad, los Correfocs y la Noche de Sant Joan.
La primera de ellas destaca por los pasacalles que se realizan por las avenidas de los principales núcleos urbanos. Varias personas se disfrazan de diablos y comienzan a realizar una serie de bailes y coreografías mientras saltan y juegan con los fuegos artificiales. Saltar sobre el fuego es algo que también se puede ver en la Noche de Sant Joan donde las playas se iluminan con decenas de hogueras.
Una de las imágenes de Cataluña
Siguiendo en el ámbito del baile, pero esta vez sin fuego, otro de los motivos festivos que mejor define a Cataluña es la sardana. Al igual que los castellers, este tipo de baile tradicional se realiza en las principales fiestas de los pueblos y se ha convertido en uno de los atractivos turísticos más sugestivos para la comunidad. Tal es su importancia que, en el año 2010, la Generalitat de Cataluña la declaró elemento festivo patrimonial de interés nacional.
La Sardana es un baile que se debe realizar en corro y con un orden concreto. El patrón que se debe seguir, a la hora de confeccionar el círculo, es el de mujer-hombre-mujer. Es decir, los participantes deben cogerse las manos por parejas. El baile suele ir acompañado de una música muy característica. En este caso la interpretación corre a cargo de las llamadas Coblas, agrupaciones musicales específicas para este género.
La fiesta de las fiestas
Si hay un motivo festivo que consigue unir a todos los catalanes y catalanas es el La Diada. El 11 de septiembre todo el mundo sale a la calle para festejar el hecho histórico producido en el año 1714. La celebración se encuentra directamente relacionada con la victoria de las tropas borbónicas en la Guerra de Sucesión. Durante este día se realizan diversos homenajes además de conciertos teatros y otras actividades de diversa índole.