La llegada de la Navidad es casi inminente. Quedan pocos días para que el timbre no deje de sonar por las visitas y para que los niños puedan levantarse con la ilusión de abrir sus nuevos regalos. En definitiva, no queda nada para organizar lo que será la despedida del 2019. Las compras navideñas marcan en cierta medida las pautas del comienzo de la Navidad. Estas se suelen hacer a partir de la segunda quincena de diciembre.
Aunque la aparición del Black Friday ha adelantado esos cargos hasta el mes de noviembre, muchas familias siguen optando por seleccionar lo necesario durante esas fechas. Regalos, comida e incluso ropa para que los más pequeños y los jóvenes puedan acudir bien arreglados a su última cita con este 2019. Es aquí donde entra el papel preponderante de la mujer, principal sostén en estas semanas repletas de caos.
Monopolio femenino
Y es que la labor de cuidar todos los detalles sigue recayendo sobre la figura de la mujer. Más del 90% de las compras de ropa infantil son realizadas por el género femenino, así lo confirma un estudio llevado a cabo por la plataforma de ropa para niños y niñas Pandabox. La figura del hombre dentro de esta tarea se encuentra completamente desaparecida. La búsqueda del look perfecto para los niños parece que sigue siendo una tarea arraigada, de forma contundente, al género femenino.
Sí es cierto que los padres suelen tener más influencia en la compra de juguetes o videojuegos. Por ejemplo, ellos se encargan de adquirir la PlayStation o los móviles de última generación, con el fin de que los niños y las niñas puedan descubrirlos tras romper en mil pedazos el papel de regalo que los oculta. La predisposición a comprar estos artículos de una forma independiente no significa que se haya producido una auténtica división de tareas.
Las mejores consejeras
La madre sigue siendo la que acompaña a sus hijos y, en varias ocasiones, la que acaba decidiendo cual es el modelo definitivo que vestirán los más pequeños. Dentro de estos, las niñas tienden a preferir el vestido como prenda idónea para renovar su armario de cara a la época navideña. Por parte de los niños, la pajarita constituirá el complemento estrella para las Navidades que ya están al caer.
Por el gran número de tareas que hay que abordar en estas fechas, hay casos en los que las madres no dan abasto entre tanto trabajo y no sacan el tiempo disponible para darle una vuelta de tuerca al vestuario de sus hijos. Este colapso se puede deber, en cierta parte, a una mala organización a la hora de repartir los innumerables oficios que colman esta época navideña.
Gasto, gasto y más gasto
Los niños también constituyen un elemento esencial dentro de las compras navideñas. A pesar de la necesidad de cambiar su ropa, la mayoría de los adultos españoles invierte gran parte del dinero de las compras navideñas en dichas prendas. Comprar artículos de moda se encuentra en lo más alto de la clasificación, junto a los libros y los productos relacionados con la cosmética. Mientras tanto, un peldaño por debajo se encuentran los videojuegos, los viajes o los juguetes.
A pesar de que casi todas las mujeres se encargan de comprar la ropa a los niños, en el computo global del gasto navideño los hombres se sitúan un poco por encima con respecto al género femenino. La diferencia es casi mínima, ya que los hombres destinan un 52% a las adquisiciones navideñas, mientras que las mujeres lo hacen en un 48%, según datos de Pandabox.
Mejores decisiones
Que las mujeres inviertan una cantidad menor no quiere decir que compren un número menor de artículos. De hecho, la realidad es completamente opuesta. El género femenino se gasta menos dinero que el masculino, pero llega con mayor cantidad de productos en la bolsa de la compra.
Estos datos reflejan la indecisión a la hora de comprar por parte de los hombres. Las mujeres acuden a las compras de Navidad con las ideas más claras, aunque siguen siendo el pilar fundamental de las mismas, ya que prácticamente se encargan de la mayoría. Quizás los hombres y los padres de familia deberían empezar a acudir a las tiendas de ropa con sus hijos.