Barcelona cuenta con cuatro estaciones de tren. La Plaza Cataluña se emplea principalmente para moverse dentro de la ciudad y en cercanías, la de Francia es popular por sus recorridos regionales y de media distancia, mientras que la de Passeig de Gracia es, probablemente, el intercambiador principal de la ciudad, situada en pleno centro urbano. Pero la más famosa y con mayor afluencia es la estación de Sants.

Sants ofrece traslados en cercanías en las líneas R1, R2, R3 y R4, pero sobre todo es popular por sus trayectos de larga y media distancia, tanto en AVE como en otro tipo de trenes, que conectan Barcelona con destinos nacionales e internacionales. De hecho, es la segunda estación de tren más importante de España, con 30 millones de viajeros anuales, solo superada por Atocha.

Taxi

La opción más cómoda de llegar a la estación de Sants es tomar un taxi. Estos cuenta con servicio de recogida y llegada de puerta a puerta, espacio para las maletas e incluso se puede programar la hora exacta de recogida. Es la opción más cara y el precio del billete depende del lugar de origen, aunque hay que tener en cuenta que se cobra un suplemento de 2,10 euros para viajes que comiencen o terminen en la estación de Sants.

Se puede coger el taxi parando a alguno de los que ya circulan por la calle, yendo a una de las paradas oficiales de este transporte, llamando por teléfono a los números habilitados para tal efecto o reservándolo a través de la aplicación móvil FreeNow, antes conocida como MyTaxi. Además, también hay otros servicios de VTC disponibles en la ciudad, como Cabify, del cual, en los últimos días, ha salido la noticia de que planea integrar al taxi en su app, como ya lo hace Uber con los taxis de Madrid.

Vías de tren / Michael Gaida EN PIXABAY

Transporte público

Muchas veces, coger el transporte público puede dar algo de pereza ya que no es lo más cómodo, pero sí puede ser lo más rápido en función del estado del tráfico. Para ello, el metro parece ser una de las mejores opciones en cuanto a rapidez, aunque depende del punto de origen en el que se encuentre el viajero. En Sants paran las líneas L3 y L5. La L3 hace el recorrido desde Zona Universitaria hasta Trinitat Nova, mientras que la L5 cubre desde Cornellá Centre hasta Vall d’Hebron.

La estación de Sants también dispone de numerosas paradas de autobuses en sus alrededores, otra manera de moverse de forma económica desde cualquier punto de la ciudad. Las líneas que conectan con ella son la 115, H10, V5, 109, CJ, N0, 78, 27 y D40. Estas líneas unen toda la Ciudad Condal con la segunda estación de tren más importante de España y permiten un mejor flujo de viajeros entre la estación y la propia ciudad, tanto en el centro como en las afueras.

Coche privado

En el caso de querer llegar en un vehículo privado, se debe saber que la estación de Sants se encuentra en una zona céntrica de la ciudad, entre los barrios de Sants y Sants-Montjuic, cerca de l'Eixample. A apenas un kilómetro de distancia hay algunos de los principales puntos de interés, como el Camp Nou, el Parque de Joan Miró, la Plaça de Espanya y la Fuente de Montjuic. También es un buen sitio, gracias a su conexión con autobús y metro, para moverse desde aquí a otros puntos de la ciudad o incluso a otras urbes cercanas.

Aparcar el coche en los alrededores de Sants no es fácil, al menos si se quiere hacer de forma gratuita. El parking oficial es el Parking Saba, aunque muy cerca de la estación se encuentran también el parking IMSA, el parking Aparca&Go o el parking Roma 2000, entre otros. A una distancia a partir de diez minutos caminando se pueden pagar tarifas más ventajosas, como el parking Holapark, con tarifas a partir de 11 euros el día. Como curiosidad, existe un parking de motos gratuito, en el propio Saba, pero hay que tener en cuenta que no incluye servicio de vigilancia.