Barcelona es el puerto más importante de España si hablamos de cruceros comerciales de pasajeros. Y la cosa no acaba aquí: si se miran datos a nivel europeo, es también el puerto más importante de Europa. En 2019, más de 800 cruceros han hecho escala en la Ciudad Condal, una cifra que va en aumento año tras año gracias al interés de las navieras y los propios cruceristas. La ubicación estratégica en el Mediterráneo también ayuda.
Por eso, es muy frecuente ver un gran tránsito de viajeros desde la terminal de cruceros hasta el centro de Barcelona, así como desde el aeropuerto Josep Tarradellas Barcelona-El Prat o la estación de tren Sants hasta dicha terminal. Hay opciones para todos los gustos y bolsillos, pero lo primero que hay que tener en cuenta es en qué terminal atraca el barco, de las siete disponibles en Barcelona.
Las terminales de cruceros de Barcelona
En total, Barcelona tiene siete terminales de cruceros, repartidas en dos zonas bien diferenciadas. Adossat Quay es la más lejana, si se toma como punto de partida el centro de la ciudad, y cuenta con hasta cuatro terminales, llamadas A, B, C y D. En la zona de World Trade Center se encuentran otras tres: la S (terminal sur), la N (terminal norte) y la E (terminal este).
Aparte de estas, existen otras dos terminales, pero destinadas a otro tipo más concreto de embarcaciones. La Maremagnum Port Vell, de pequeño tamaño y que se utiliza para barcos grandes que no son cruceros; y la Sant Bertrand, de donde parten los ferries que conectan Barcelona con las Islas Baleares.
Desde Adossat Quay
Si el crucero llega a las terminales A, B, C y D de Adossat Quay, la opción más económica es tomar el Portbus, un autobús que conecta específicamente este lugar con el centro de Barcelona y está diseñado para la llegada de los cruceros, por lo que no tiene horario fijo y depende de la llegada y salida de los cruceros. Hace parada en estas cuatro terminales y en el Monumento de Colón, ubicado al principio de la famosa Rambla. A pie, este trayecto tomaría en torno a 30-40 minutos.
No se incluye dentro de la red de autobuses de Barcelona, por lo que hay que sacar un ticket especial para poder hacer uso de él. El billete se compra en el propio autobús y tiene un precio de 3 euros, si se coge solo ida, o 4 euros, si se coge ida y vuelta. Es mucho más económico que el taxi, que tiene un precio en torno a los 10-12 euros por trayecto.
Desde el World Trade Center
Los cruceristas que lleguen a cualquiera de las tres terminales del World Trade Center están de suerte ya que, si su forma física se lo permite, se puede llegar caminando hasta el centro de Barcelona. A pie, apenas 7 minutos andando separan el World Trade Center del Monumento a Colón, el punto de partida de las visitas al centro de Barcelona.
También existe un autobús de línea regular, el V11, con el que se puede llegar a diferentes zonas del centro de Barcelona y a las principales estaciones de metro de la ciudad. Por supuesto, también hay taxis disponibles a la salida de estas terminales y, aunque el recorrido es muy corto, por la bajada de bandera y el posible tráfico que se puede encontrar, el precio por trayecto puede ser en torno a 10 euros.
Desde el aeropuerto
Como bonus track, se ofrece también la información necesaria para llegar desde el aeropuerto a la terminal de cruceros, para aquellas personas que tengan la salida marcada desde la ciudad de Barcelona y lleguen a la misma por aire. En este caso y a pesar de que es una ruta muy común, no hay conexión directa desde el aeropuerto hasta las terminales de cruceros.
Se puede tomar el metro o el Aerobus (5.90 euros) hasta Plaza de España y después conectar, en la L3, con la estación de Drassanes, que queda ubicada a pocos pasos de la parada del Portbus y del V11. El taxi sería la opción más cómoda, pero también la más costosa, con una media de 30 euros por trayecto.