Más de 10 millones de personas hablan catalán en el mundo. La lengua no se limita a ser exclusivamente de unos territorios concretos sino que pequeñas comunidades en América dialogan a través de este idioma romance. Dentro de la península ibérica es idioma oficial en Cataluña, Comunidad Valenciana e Islas Baleares junto al Castellano. Este idioma posee una historia más que peculiar que merece la pena ser contada.
El catalán deriva directamente de un latín vulgar que era practicado por los habitantes romanos que residían en Hispania, una de las provincias más importantes del imperio y su transcendencia llega prácticamente hasta nuestros días. Con el fin de que el idioma siga perviviendo en las generaciones actuales y futuras, la Generalitat ha presentado una serie de ayudas y subvenciones para formarse y seguir perfeccionando el uso del catalán.
Apuesta por la enseñanza
El gobierno catalán está ofreciendo diversos planes de formación en lo que a educación se refiere. Hace relativamente poco que se presentaban unas ayudas destinadas a la formación de los jóvenes artistas residentes en Cataluña. Las becas alcanzaban cifras de más de 1.000 euros además de complementarse con estancias tanto en academias locales como en países de Europa y Latinoamérica.
Ahora las ayudas en educación vuelven a ponerse de manifiesto con las Ayudas Interlingua. Además de intentar fomentar el catalán y la lengua de signos catalana, pretende potenciar también el uso de terceras lenguas, que podrían ser el castellano o el inglés entre otras. El plazo para solicitar la beca lleva abierto desde finales de octubre y no se clausurará hasta el día 25 de noviembre.
Espíritu de cooperación
La convocatoria para el 2020 se encuentra diferenciada en dos modalidades. La modalidad A está destinada para proyectos abiertos al resto del mundo así como los planes de cooperación entre diferentes universidades. Dentro de este nivel hay varias opciones de proyectos destacando los Interuniversitarios y los de una sola universidad. Los cursos virtuales a través de programas interactivos también se encuentran en el eje de esta modalidad.
Los Interuniversitarios destacan porque los trabajos se llevan a cabo en colaboración con dos o más universidades que se ponen a disposición dentro del conjunto de las universidades catalanas. Por su parte, en el de una sola universidad el total de los resultados son aplicables a cualquier universidad de Cataluña. Los cursos virtuales de la modalidad A corren a cargo de las plataformas Parla.cat y Aula Maestra.
Las aulas virtuales, una opción diferente
Parla.cat es un espacio en la web que permite una serie de materiales didácticos para aprender o hacer un mejor uso del catalán si es que ya se tiene conocimiento de él. A parte de todas las opciones de aprendizaje, el espacio permite interactuar con otros alumnos para compartir experiencias y curiosidades acerca de los cursos impartidos. La inscripción permite acceder a dos modelos de trabajo, uno de forma libre y otro con el apoyo de una tutoría.
La otra alternativa a Parla.cat es Aula Maestra. El funcionamiento es similar a la plataforma anterior. Aula Maestra lleva en funcionamiento desde el mes de septiembre del 2012. Una de sus grandes ventajas es que permite el diseño de los cursos en catalán y su posterior inserción en la plataforma para que todos los alumnos puedan tenerlo a su disposición.
Una ayuda para todas las variedades
La modalidad B de estas Ayudas Interlingua descansa en el pilar del ámbito intrauniversitario. En este caso todos los proyectos internos deberán ir de acuerdo con el plan de lenguas de cada universidad. Los diferentes trabajos tanto de la modalidad A como de la modalidad B se tienen que llevar a cabo durante el año 2020. Los cursos de aprendizaje de lenguas si que se pueden realizar durante la campaña 2019-2020.
Además de la lengua de signos catalana y del propio catalán hay otra serie de variedades por las que se concede la ayuda. Una de ellas es el Occitano. Esta lengua es hablada, aproximadamente, por unos dos millones de personas. Gran parte de sus hablantes se encuentran en zonas de Cataluña, como el Val d’Arán, o en regiones ya incrustadas dentro de territorio aragonés. El Occitano, al igual que el Catalán, deriva de una lengua romance.