Los meses de septiembre y octubre son tradicionalmente los más movidos en cuanto a novedades tecnológicas y es cuando los fabricantes comienzan a presentar todas las que serán sus novedades de cara a la campaña navideña, el momento más importante del año. En esta ocasión le ha tocado el turno a Google, que ha presentado una nueva gama de productos para el hogar, además de su nuevo teléfono móvil: el Pixel 4.
La compañía ha realizado un gran esfuerzo de innovación este año para que este dispositivo esté entre los mejores del mercado, incorporando entre otras cosas una nueva cámara trasera, reconocimiento facial y, sobre todo, una serie de sensores para poder utilizar el teléfono sin manos. Así es como funciona el Pixel 4.
Diseño elegante
Lo primero que llama la atención de este teléfono es la ausencia de notch, esa pequeña ceja que corona la mayoría de smartphones en la actualidad y que sirve para ocultar los sensores de reconocimiento facial y la cámara delantera. El iPhone de Apple ha vuelto a apostar por este diseño, como clara manera de posicionarse, pero Google ha resuelto el problema dejando toda una banda superior negra que encaja bien con el resto del teléfono.
En la parte trasera integra un módulo para la nueva doble cámara que combina un sensor de 12 mega píxeles con otro de 16. Zoom óptico de 1,8 aumentos y la posibilidad de capturar vídeo hasta en 4K a 30 fps (frames por segundo). Aunque la verdadera innovación la encontramos en sus nuevos sensores, capaces de obtener mejores fotografías gracias a la utilización del Live HDR+.
Una cámara inteligente
Y es que está es posiblemente la mayor innovación del teléfono de Google, que incorpora varias mejoras en lo digital para captar mejores imágenes. Lo hace con la tecnología que ellos denominan Super Res Zoom, que permite obtener mejores resultados en las imágenes tomadas a distancia.
También con un nuevo modo nocturno, apodado como Night Sight, que se luce en condiciones de baja luminosidad así como en fotografía astronómica. Pero para las imágenes del día a día, parece que el HDR+ será la auténtica funcionalidad estrella, ya que permite "ajustar el brillo y la cantidad de detalle en las sombras para conseguir el mejor balance en las fotografías más difíciles", según explican desde la compañía.
Control 'sin manos'
Aunque el detalle más llamativo del Pixel 4 es la posibilidad de realizar algunas acciones sin utilizar las manos. Para ello, hace gala de un sensor de reconocimiento facial y de movimiento (el Motion Sense) que permite reconocer cuándo el usuario coge el teléfono o está cerca, para desbloquearlo.
Este mismo sensor es el encargado de activar los Quick Gestures, con los que se podrán controlar funciones del teléfono que los usuarios utilizan con frecuencia, como subir y bajar el volumen de una canción, avanzar o retroceder en una lista de reproducción, posponer la alarma, activar temporizadores o poner el teléfono en silencio.
Nuevas aplicaciones
Aunque aún habrá que esperar para ver si este sistema resulta realmente útil o se queda en lo anecdótico, lo cierto es que es estimable el intento por ofrecer nuevas funcionalidades lejos de lo que hacen otros fabricantes. Y para ello, el Pixel 4 vendrá de serie con nuevas aplicaciones para hacer la vida más fácil a los usuarios.
Una de ellas, la más llamativa, es la nueva aplicación de notas, que según lo que se pudo ver durante la presentación del teléfono permitirá grabar todo tipo de audio, incluso en reuniones o conferencias, y transcribirlo directamente a texto. De momento solo está disponible en inglés, pero la compañía ha prometido que lo extenderá a nuevos idiomas a lo largo de 2020, abriendo un nuevo mundo de posibilidades.
Potencia y precio 'premium'
El Pixel 4 está ya disponible con 6 GB de memoria RAM, una pantalla de 90hz y vendrá con Android 10 instalado. Eso sí, al igual que sus características, su premio también es premium y estará disponible desde 759 euros en su tamaño estándar y en 899 euros para el Pixel 4 XL.