Tras la retirada del medicamento afectado por la orden de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) por sus posibles efectos cancerígenos, muchos colectivos de riesgo se han empezado a hacer preguntas sobre la idoneidad de este tratamiento, como es el caso de las embarazadas.
La a ranitidina es un principio activo que se usa para reducir las producciones de ácidos estomacales en situaciones como la úlcera gástrica o el reflujo gastroesofágico. Esta sintomatología suele ser muy frecuente en el embarazo y eso ha hecho disparar todas las alarmas.
Llamada a la calma
La prestigiosa clínica Dexeus explica en un comunicado que esta decisión es una medida de precaución que se ha tomado ante la detección de nitrosaminas de algunos lotes, unas substancias que podrían tener un efecto cancerígeno si se acumulan en el organismo a partir de pruebas con animales. A pesar de eso, la agencia explica que no hay ninguna evidencia de que esto haya podido provocar daños en los pacientes que lo han tomado.
Por eso, desde el centro médico recuerdan que en el mercado existen otros medicamentos con principios activos como el omeprazole, el pantoprazole o el lansoprazole que ejercen la misma acción terapéutica que la ranitidina y que no tienen ningún efecto perjudicial sobre el embarazo. Eso sí, recuerda que debe ser el médico quien indique cuál es la alternativa.
Paciente general
En términos generales, el Col·legi de Farmacèutics de Barcelona (COFB) se suma a Dexeus al recordar que existen tratamientos alternativos con los mismos principios activos de la ranitidina. De todas formas, recuerda que en ningún caso se han registrado estos problemas en personas, solo en animales.
La vocal de oficina de Farmacia del COBF, Francisca Aranzana, ha explicado a Crónica Global que apoyan esta suspensión: "Todo lo que sea prevención nos parece bien". Eso sí, consideran que las personas sometidas a este tratamiento pueden seguirlo con la ranitidina sin interrupciones hasta que el médico les recete la nueva alternativa.