Una de las quejas más repetidas a lo largo del tiempo por los alumnos es que las clases a las que asisten suelen ser aburridas debido a que los encargados de impartir las materias se limitan a repetir una y otra vez los contenidos, sin conseguir llamar su atención ni incentivarles a aprenderlos. Sin embargo, hay profesores como Cristian Olivé que utilizan métodos poco convencionales, pero bastante efectivos.
Olivé, uno de los docentes de la asignatura Lengua y Literatura en el colegio Joan Pelegrí de Barcelona, se ha convertido en una estrella de las redes sociales gracias a sus curiosas herramientas educativas. Porque a los tradicionales libros de texto suma otros elementos tan novedosos y poco comunes en las aulas como la música de Rosalía, las series de Netflix o Fortnite para tratar de inculcar los conocimientos a sus estudiantes.
'Élite', 'Sex Education, 'Black Mirror'...
Sus tuits explicando los métodos utilizados en sus clases se han hecho virales en las últimas semanas. De esta forma, a finales de enero Cristian Olivé explicó cómo sacar partido de los recursos que ofrece Netflix para las clases de Lengua y Literatura en secundaria. Élite, una de las series de moda entre los más jóvenes y que “aporta esa atmósfera envolvente de misterio que tanto gusta a los adolescentes”, puede ser utilizada para “sobre el plano real del instituto, situar la escena de un crimen, imaginar culpables y elaborar una noticia con las seis preguntas básicas del periodismo”.
Con Sex Education, “una serie fresca y con una temática atractiva por razones obvias”, el profesor sugiere que “en pequeños grupos, los alumnos pueden exponer sus dudas sobre sexo, preparar un cuestionario, investigar sobre dichos temas y, a modo de entrevista, recrear un consultorio juvenil como en la serie”. Y hay más ejemplos con otras ficciones populares como La Casa de Papel, Merlí, Black Mirror o ¡A ordenar con Marie Kondo!
'Fortnite' y 'El mal querer' de Rosalía
Aunque los videojuegos son detestados tradicionalmente por la comunidad educativa, también pueden ser utilizados para aprender, tal y como demostró Olivé. En su caso, organizó una actividad valiéndose de Fortnite “para fomentar el espíritu crítico y el trabajo en equipo” mientras sus alumnos aprendían sobre literatura distópica.
¿Se puede utilizar un disco de música para hacer un análisis literario? La respuesta es afirmativa y nuevamente fue el docente del colegio Joan Pelegrí el encargado de demostrarlo utilizando el disco El mal querer de Rosalía como herramienta educativa.