Un estudio llevado a cabo por un grupo de investigadores científicos de la Universidad de Colorado (CU) en Estados Unidos ha descubierto un increíble e inusual hallazgo en las propiedades del parásito Toxoplasma Gondii, frecuentemente encontrado en los gatos. Según sus estimaciones, este tipo de parásito puede ser un factor determinante para desarrollar en las personas un espíritu emprendedor más marcado, puesto que suele ayudar a aumentar instintos como la audacia o la desestimación del riesgo.
Tal y como explica Stefanie K. Johnson, profesora de la Universidad de Colorado y miembro de esta investigación, la presencia del parásito T. Gondii es capaz de reducir nuestro “miedo racional” ante circunstancias de riesgo. Por ello potencia un clima idóneo para personas que estudian la economía y las inversiones de capital, e influye sobre nuestras decisiones, algo de lo que no pueden presumir todas las personas por tener miedo al fracaso.
“A los humanos nos gusta pensar que estamos en control de nuestras acciones. Pero las investigaciones emergentes revelan que los microorganismos que encontramos en nuestra vida diaria tienen el potencial de influir en sus huéspedes de una manera significativa”, concluye la profesora Johnson.
El estudio del parásito
Para llevar a cabo la influencia del parásito en las personas infectadas, el equipo científico de la CU realizó un estudio para el que contó con la colaboración de 1.500 estudiantes infectados por el T Gondii. El resultado fue que las personas infectadas son hasta 1,4 veces más proclives a realizar carreras relacionadas con empresariales, estudios de mercado y negocios durante la época universitaria.
Entre otros datos relevantes de la investigación, las personas portadoras del T Gondii consiguen alcanzar puestos ejecutivos 1,7 más veces, y llegan a manejar su propio negocio, 1,8 en más ocasiones. Para completar la investigación, el equipo científico comparo los ratios de infección y emprendimiento en 42 países descubriendo que eran directamente proporcionales, a mayor contagio, mayor nivel de emprendimiento experimenta el país.
Sin duda, lo que resulta fascinante de esta correlación es la revelación de que ciertas infecciones o microorganismos pueden ser capaces de provocar cambios en nuestro cerebro llevándonos a adquirir conductas o decisiones, arriesgadas y de una gran repercusión.