Las campañas viales para sensibilizar del peligro que rodea la circulación y la carretera son cada vez más cruentas y explícitas.

No solo por lo que respecta a los vehículos y la conducción temeraria o bajo los efectos del alcohol, sino también por lo que se refiere a los peatones. Cada vez hay más gente que cruza la calle y se despista porque está usando su teléfono móvil o porque no ve el riesgo que tiene cruzar con el semáforo en rojo.

Un susto a tiempo

Una nueva campaña en Francia se basa en asustar a todos aquellos que ponen en riesgo su vida al pasar con el semáforo en rojo

La campaña simula un estruendo de cuando un coche choca para que los peatones crean que están a punto de ser arollados. Una vez llegan a la otra cera se encuentran una especie de marquesina con su foto del momento crucial. Las caras de susto, pánico y miedo no tienen desperdicio. 

A los que les ha sucedido se les ha metido el miedo en el cuerpo y, tras esta experiencia, se lo pensarán dos veces antes de pasar en rojo...