Zhao Lang es el dueño de un restaurante en la ciudad de Jinan, China, que ha decidido dar de comer gratis o con un amplio descuento a los comensales que sean capaces de pasar una prueba.
A la entrada en su restaurante, Lang ha ubicado unas barras de hierro para que los clientes pueden deslizares entre ellas. Las barras conforman distinas medidas corporales y aquellos que sean capaces de pasar entre las más estrechas conseguirán una rebaja parcial o total.
Desafío
Lang, además, concibió niveles diferentes en ese "desafío", cada uno con su descuento correspondiente. Los vencedores del primer nivel, en el que sólo hay 15 centímetros de separación entre las barras, disfrutan de comida y bebidas gratis para todos los que se sienten en su mesa. Entre tanto, en la última de las entradas, donde la distancia supera los 30 centímetros, quienes logran pasar se encuentran con un cartel que les pregunta: "¿Está seguro de que de verdad debe beber cerveza?".
Lang ha iniciado este reto para recordar a las personas la importancia de vigilar su dieta y tener una vida sana. Asegura que muchas personas se quejan de su peso, pero fracasan porque no pueden dejar de beber cerveza y comer, por lo que considera que las rebajas en su comida les estimularán a controlar su figura.
Esa oferta especial llama la atención de todos y ha atraído clientes potenciales, que ahora tratan de ganar el primer premio. Por lo menos una persona logra hacerlo cada día, afirma el propietario del restaurante, precisando que es siempre una mujer.