Cuando se acaba una relación con nuestra pareja, muchos intentan mantener una relación de amistad cordial por todo lo que se ha vivido juntos, si es que el final es bueno.

El deseo de seguir siendo amigos puede parecer algo inofensivo, pero puede reflejar el lado más oscuro de la personalidad de las personas.

Un estudio realizado por la Universidad de Oakland, Estados Unidos, en el que se analizaron las personalidades y relaciones de 861 personas concluyó e que muchos de ellos tenían rasgos de personalidades oscuras, con fuertes repuntes de narcicismo, maquiavelismo y psicopatía.

Los investigadores preguntaron cómo era la relación con sus ex y por qué seguían siendo amigos.  El estudio reveló que la idea de mantener la amistad con una persona con la que tuvimos una relación sentimental da a ambos ciertos beneficios como información, dinero, amor o sexo.

Los hombres por su parte, suelen mantener contacto para beneficiarse en el sexo esporádico con sus anteriores parejas.

"A pesar de que una ruptura nominalmente marca el final de una relación romántica, la presente investigación sugiere que el intercambio de recursos entre ex parejas puede extenderse más allá de la disolución de la relación", detallaron los autores del informe.