La atracción entre géneros suele ser física. Las primeras impresiones, rasgos físicos y el carácter de una persona suelen ser factores clave para que una persona nos atraiga.

Aun así, el mito es que en lo que a hombres se refiere el estereotipo de mujer bella, reside en unas piernas largas y pechos grandes, al menos hasta ahora.

Un estudio realizado por el profesor David Bainbridge, especialista en biología evolutiva de la Universidad de Cambridge, ha revelado que la mayoría de los hombres no se fija en el físico para sentir atracción por una mujer. Brainbridge asegura que el sexo masculino se siente antes atraído por una mujer inteligente que por una con un cuerpo espectacular.

“La inteligencia es, con mucho, la cualidad más atractiva para los hombres que buscan una compañera a largo plazo porque es probable que sea una madre responsable”. A pesar de ello, es evidente que el físico importa, tanto de ellas como de ellos, a la hora de sentirte atraído por alguien como una futura pareja. De esto también habla el biólogo David Brainbridge en su estudio. Según sus conclusiones, la atracción física es algo más complicado de lo que pensamos y se puede llegar a basar en cosas de las que ni siquiera somos conscientes, como la simetría o la perfección de algunas partes como síntoma de salud, como por ejemplo las piernas o los pechos.