La revista 'Advances in Urology' publicó un estudio que concluía que ciertas posturas sexuales conllevan un mayor riesgo de fractura de pene, especialmente en las relaciones heterosexuales.

Aunque el pene no tenga hueso, también se puede fracturar. Posturas tan habituales y aparentemente sencillas como 'perrito', el ‘misionero’ o la ‘vaquera’ son las más peligrosas.

Un estudio más reciente desarrollado por 'Journal of Impotence Research' asegura que el perrito es la postura más peligrosa. En este estudio se han analizado los casos de 90 pacientes que habían sufrido una fractura de pene y se determinó que en el 44% de ellos la lesión ocurrió con la postura del ‘perrito’ y un 25% con la del ‘misionero’.

El riesgo de estas posturas es que el pene puede golpear accidentalmente la pelvis o el suelo pélvico y puede provocar este tipo de lesiones. Aun así, tampoco hay que alarmarse ya que este tipo de fracturas son poco comunes.