Un bar de la localidad tarraconense de Valls regala cuchillos entre su clientela para denunciar la inseguridad que, según sostiene, existe en su barrio antiguo.

La iniciativa, que ha tenido amplia repercusión en las redes sociales, pretende reflejar, en tono irónico, el malestar existente entre comerciantes y vecinos de la zona.

"Degradación"

El propietario del bar, Jordi Sans, reclama al ayuntamiento que intervenga para acabar con la "degradación continua" que padece el centro de la ciudad, según Diari de Tarragona.

Ciudadanos y comerciantes han denunciado diversos casos para ilustrarlo en sus redes, como por ejemplo los presuntos encuentros de traficantes en un solar conocido como Can La Mateueta.