La ceremonia del Balón de Oro no ha dejado indiferente a nadie. Si todos los años ocurre algo, este no iba a ser menos. En esta ocasión también ha habido momentos de impacto y no solamente por los estilismos. La jugadora de fútbol del Olympique de Lyon de la primera división femenina, Ada Hegerberg, fue la desafortunada protagonista de la noche.
La delantera noruega recogía el Balón de Oro a la mejor futbolista del mundo, un premio que se otorgaba por primera vez. Por lo tanto, era una gala para hacer historia. Aprovechó su discurso para animar a las mujeres y a las niñas “a creer en sí mismas”. Sin embargo, lo que vino después enturbió el mágico momento.
Entonces llegó la pregunta
A Martin Solveig, dj y productor, se le ocurrió invitar a Hegerberg a hacer twerking o, lo que es lo mismo, bailar de forma sensual. La delantera del Lyon supo salir de paso respondiendo con un contundente no y con un semblante más que serio segundos antes de bajar del escenario. El suceso, que apenas duró unos minutos, ha corrido como la pólvora en internet.
Solveig supo reaccionar a tiempo y se disculpó, incluso bailó después con la jugadora. Además, dada la repercusión de su error, publicó un mensaje en sus redes sociales para volver a pedir perdón.
Un chiste sin gracia
En el vídeo que publica en Instagram el presentador de la gala explica que “no quería ofender a nadie”. Además, añade Solveig que “fue un chiste, seguramente uno malo”. Una broma que en las redes sociales ni se ha entendido ni ha hecho gracia.
Si de algo ha servido es para eclipsar a Ada. La delantera, que era la primera en ser reconocida como la mejor jugadora del mundo, tuvo que vivir este momento agridulce durante la gala. Seguro que ninguno de los dos se olvida de este premio.