"Voy a incendiar el teatro", afirmaba airada Soraya, una participante de Got Talent 3, después de haber quedado eliminada con su número. La mujer, que se definía como poetisa, preparó un espectáculo en el que mezclaba la lírica con el bodypainting. Recubierta de globos, los hacía estallar mientras declamaba.
La propuesta solo resultó del gusto de Risto Mejide: "Lo que me gusta de tu número es la cantidad de gente a la que no le gustará", valoró el publicista, que reconocía sentir afinidad por acciones artísticas arriesgadas "que nos hacen preguntarnos más allá de la estética". "Te doy un sí que ojalá valiese por cuatro", concluyó el también presentador del Chester.
No tuvo la misma suerte con el resto de jueces. Tras tildar el número de poco preparado, Soraya destacó las ocho horas que había requerido para pintar su cuerpo. "¿Tú sabes lo que tardan en maquillarme a mí con la cara que tengo?", replicó Eva Hache.
La reacción
"No me lo creo, no me lo creo", repetía ella después de decir que quemaría el teatro. Santi Millán trataba de tranquilizar a la joven, que pedía una segunda oportunidad.
"La reacción que tienes no merece la pena. Tienes que estar más segura de ti misma y de que lo que haces merece la pena", le dijo el presentador. Con todo ella no evitó proferir unos cuantos exabruptos adicionales al abandonar el programa.