Excitarse sexualmente no siempre es tan fácil como las películas y la televisión nos hacen creer. Incluso el hombre más confiado, explica Medical Daily, necesita las condiciones adecuadas para lograr una erección. Lo mismo puede decirse de la mayoría de mujeres. Un estudio reciente realizado en la Universidad de Portsmouth recogido por el portal digital ha encontrado que ser desagradable mata la excitación sexual de la mujer de forma mucho más veloz que otros tipos de estímulos negativos, como el miedo.
"El sexo incluye un mayor contacto con olores corporales y líquidos. En otros contextos, esto mismo puede provocar asco", afirmó en un comunicado la doctora Diana Fleischman, psicóloga evolucionista del Departamento de Psicología de la Universidad de Portsmouth. "Las mujeres son más vulnerables a contraer enfermedades a través del sexo que los hombres y muestran peores resultados una vez infectadas, por lo que debemos esperar que se vean especialmente poco excitadas cuando algo les produce asco".
Fleischman y sus colegas reclutaron 76 mujeres heterosexuales entre 18 y 42 años. Se dividieron en cuatro grupos: uno que mostraba imágenes repugnantes antes de ver una película erótica; un segundo grupo que miraba una película erótica antes de mostrar imágenes repugnantes; un tercero que mostraba imágenes aterradoras antes de ver una película erótica, y un cuarto grupo que miraba una película erótica antes de mostrarse imágenes espantosas.
Las escenas asquerosas incluían imágenes de humanos enfermos o heridos, cadáveres humanos, heces y vómitos. Mientras que las escenas aterradoras incluían imágenes de personas violentas, animales peligrosos, armas, alturas, tornados y fuego. Las películas eróticas fueron producidas por mujeres y diseñadas para ser sexualmente atractivas para las mujeres. Las mujeres informaron sus propios grados de excitación, asco y miedo. El mismo grupo femenino también iba equipado con fotopletismografías vaginales, dispositivos de acrílico en forma de tampón utilizados para medir el flujo sanguíneo a la vagina y conocer la excitación de los genitales.
Tres veces menos excitadas
Las mujeres que fueron expuestas a imágenes repugnantes antes de ver una película erótica reportaron tres veces menos de excitación sexual de aquellas a quienes se les mostró una imagen aterradora. Estudios similares en el pasado han encontrado que los hombres son menos propensos a encontrar algo asqueroso cuando se excitan sexualmente. El equipo de investigación llegó a la conclusión de que no se puede decir lo mismo de las mujeres que tienden a tener una mayor vulnerabilidad para contraer una enfermedad de transmisión sexual (ETS) que los hombres.
"Cuando estamos decidiendo si tener relaciones sexuales, hay compensaciones a considerar", agregó Fleischman. "Por un lado, usted debe tener relaciones sexuales para reproducirse, y por otro lado, los encuentros sexuales son riesgosos para la transmisión de la enfermedad. Lo que nuestros resultados sugieren es que la historia es más complicada para las mujeres y que las mujeres difieren en cómo la excitación sexual cambia ante un hecho que les produce asco".