Jenny es una chica de 31 años que tiene hipersexualidad desde los 17. Tras 14 años con esta condición especial ha decidido contar su historia a la revista 'Elle' que no ha dejado indiferente a nadie. Jenny cuenta que quiere contar de qué se trata para concienciar de algunas dificultades que padece en el día a día, aunque también confiesa que ha aprendido a convivir con ello. La hipersexualidad es una condición que convierte al sexo en una prioridad vital. Todo se debe a una subida de la libido que deriva en una adicción y que, en algunos casos, puede presentar un comportamiento obsesivo-compulsivo que se intensifica con la ingesta de alcohol.
Jenny asegura que empezó a tener hipersexualidad a los 17 cuando tuvo su primer orgasmo y explica "hay momentos en los que me siento tan excitada que si no hago nada para solucionarlo me puedo volver loca". En la entrevista, cuenta que su primer orgasmo cuando aún era una adolescente cambió su vida. "Recuerdo cuando me encerré en mi habitación, tumbada en la cama y completamente decidida a correrme. Cuando lo conseguí por primera vez me resultó algo increíble. Desde entonces, me vi inmersa en la rutina de utilizar el consolador entre cinco y seis veces al día. Solía llevar en mi bolso un silencioso vibrador que usaba hasta seis veces al día en casa o en los baños del trabajo".
Además, esa necesidad física de sentir placer sexual aumenta con los altos niveles de dopamina que incrementan las anisas de sexo. Para intentar llevar una vida más normal, se sometió a un tratamiento de rehabilitación y tuvo que pasar por un periodo de seis meses de castidad cuando conoció a su actual pareja y volvió a recaer hasta el punto que empezaron a ser habituales en locales liberales y de intercambios de parejas. Sobre esos intercambios, asegura que "si hubiéramos tenido la oportunidad de pasar todo el día allí lo habríamos hecho".