Andrew Flinders Taylor, un hombre residente en Australia, decidió someterse a una dieta muy peculiar basada en única y exclusivamente en la ingesta de patatas. Este hombre, en contra de toda expectativa, consiguió perder 50 kilos en el período de un año, tiempo en el que sólo se alimentó de tubérculos.
Pese a que la mayoría de nutricionistas recomiendan llevar una dieta equilibrada, con la presencia de alimentos que aporten proteínas, carbohidratos, verduras, frutas, lácteos y grasas, este hombre consiguió obtener todos los nutrientes tan sólo con patatas. Bajo una supervisión médica y la ayuda de un dietista, comió una una mezcla de variedades dulces y blancas del tubérculo.
Tal y como explica, "recibí más del 600 % de hierro y más del 400% de vitamina C, además de un montón de fibra." "Lo único preocupante ha sido el calcio, las patatas tienen calcio pero quizás no lo suficiente. Para estar seguro de estaba ingiriendo el que necesitaba mi organismo lo comí mezclado con leche de soja orgánica para hacer un puré de patatas". Las patatas blancas contienen todos los aminoácidos esenciales que se necesitan para generar proteínas, reparar células y combatir las enfermedades, pero únicamente ingerir patata puede provocar una deficiencia de vitaminas en el organismo.
Durante los primeros meses de su dieta, Taylor no realizó ejercicio físico complementario. Posteriormente, comenzó a hacer, durante una hora y media al día, bicicleta estática. Un año después, sigue siendo un amante de las patatas y asegura que "mi salud sigue mejorando. Tenía colesterol alto, pero ahora está bajo. Mi presión sanguínea ha bajado y mi nivel de azúcar ha caído".