Si la cuesta de enero es económica tras las fiestas navideñas y de fin de año, la de septiembre es más emocional –aunque el dinero gastado en vacaciones también se nota en la cuenta corriente. Volver del verano y reincorporarse a las ocho horas de trabajo diarias no es fácil. Éstos son cinco trucos para superar el estrés de septiembre:

  1. Sí al picoteo sano. La concentración no es fácil de recuperar durante los primeros días de trabajo. Mantener los niveles de azúcar y nutrientes altos puede ayudar, y qué mejor manera de conseguirlo que picando entre horas. Almendras, yogures y barritas energéticas con avena serán los mejores snacks.
  2. Las cervezas afterwork, las justas. Volver después de un periodo largo sin ver a los compañeros de trabajo puede resultar en una rutina de cervezas afterwork para ponerse al día. Para mantener el cuerpo sano, mejor evitar las bebidas alcohólicas por su cantidad de calorías y las tapas grasientas.
  3. Tupper vs menú. Es recomendable preparar comida casera para adquirir el hábito una vez terminadas las vacaciones. Los menús diarios son fáciles y baratos, pero los tupper, mucho más sanos. La mitad de la fiambrera tiene que ser de vegetales, un cuarto de proteína y el restante de hidratos de carbono. Todo, acompañado de fruta o yogurt.
  4. Motivación en el trabajo. Es importante mantener la inspiración y motivación para trabajar para ser más productivos. El ambiente tiene que ser el adecuado y se recomiendan colores verdes y azules para favorecer la calma y la concentración.
  5. Mantener la postura. Los dolores de espalda, irritación en los ojos y migrañas son habituales en las vueltas de vacaciones. Para evitarlo, es importante mantener una postura adecuada, con ángulos de 90 grados y la espalda recta.