Kim Wall es una periodista sueca que falleció la semana pasada mientras realizaba un reportaje en un submarino de fabricación casera, inventado por un danés, Peter Madsen. El detenido, explicó a la policía que tras navegar con el submarino, dejó a la joven en una isla del puerto de Copenhaguen, y que siguió con su camino hasta que sufrió problemas técnicos.
Este lunes, la fiscalía ha revelado el secreto de sumario, en el que se explica el cambio de confesió de Madsen. Tras una extraña desaparición, en que las fuerzas suecas y danesas han buscado a la joven, el detenido ha confesado que la periodista sufrió un accidente en la embarcación y tras fallecer decidió tirarla al mar por el que navegaban, el Báltico.
El juzgado de primera instancia que ha dictado prisión preventiva para Madsen, sospechoso de homicidio involuntario, haya decidido levantar parcialmente el secreto de sumario, a petición de la fiscalía y de la defensa.
La policía danesa había admitido que da por muerta a Wall y que la búsqueda del cadáver se centraba en la bahía de Køge, tanto del lado danés como del sueco, ya que se cree que las corrientes podrían haber llevado el cuerpo hasta aguas de Suecia.