La amenaza de tsunami en la costa andaluza se cierne sobre el Golfo de Cádiz. Muchos científicos tienen la certeza de que, pronto o tarde, una ola gigante arrasará con las playas del oeste de Andalucía.

La denuncia de la situación se anuncia en un documental de Fernando Arroyo titulado “La gran ola” en el que intervienen expertos en la materia. Científicos, expertos sísmicos de España y Portugal.

Las costas en peligro son las de Algarve, Portugal, Huelva y Cádiz. La teoría que proponen es tan simple como rotunda. María Eugenia Petit, profesora de Historia y experta en catástrofes históricas, señala que “los tsunamis se han repetido y se repetirán porque conozco la máxima geológica de que cada vez que hay un desastre, volverá a suceder. Y eso no lo podemos olvidar”, señala María Eugenia Petit, profesora de Historia y experta en catástrofes históricas. 

A 400 kilómetros del Cabo de San Vicente hay varias fallas. Esas mismas causaron el terremoto que destruyó Lisboa en 1755 y que impulsó un tsunami a las costas de Huelva y Cádiz. Emilio Carreño, director de la Red Sísmica Nacional, también lo tiene como referencia y asegura que “sabemos que se puede repetir. Desde el famoso terremoto de Lisboa, todos los días tenemos sacudidas. Es una zona activa, aunque no podemos saber el periodo de retorno ni cada cuánto tiempo ocurren estos tsunamis, porque no tenemos constancia de muchos otros que hayan ocurrido para establecer una pauta de comportamiento”.

Todos los expertos han unido sus voces para reclamar que se informe a la población de esas provincias que no tienen protecciones naturales debido a su cercanía a la costa y por ser zonas muy planas donde la ola no encontraría oposición. Con este documental quieren pedir a las administraciones que enseñen a la población a cómo actuar en caso de catástrofe, igual que hacen los japoneses.

Baelo Claudia, la antigua ciudad romana que ahora se encuentra a 22 kilómetros de Tarifa, fue arroyada por una ola gigante en el siglo II tal y como demuestran las pruebas arqueológicas.

Además, subrayan que la red de alerta de tsunamis de España sólo reacciona cuando la ola llega a tierra. Eso significa que desde que la ola toca el Cabo de San Vicente, a una velocidad de 800 km/h, deja un margen de reacción de apenas 45 minutos para Ayamonte, 60 para Huelva y 80 para Cádiz, una ciudad plana, muy expuesta y con sólo un par de salidas para más de 100.000 habitantes.