La autolesión es un asunto grave que afecta a más jóvenes de lo que comunmente se piensa. Una nueva investigación de las Universidades de Bristol, Oxford y College London constató que alrededor del 16% de adolescentes se habían inflingido lesiones en algún momento de su vida.
La investigación recolectó datos de 4.799 adolescentes como parte del Children of the 90s (Niños de los ’90, uno de los estudios con mayor muestra del mundo) para examinar las consecuencias de auto-lastimarse.
Depresión y drogas
El acto de autolesionarse se vinculó con con problemas de salud mental y abuso de sustancias en la adultez temprana.
Como informa Psyciencia, cuando los científicos examinaron su progreso durante los 5 años posteriores, hallaron que incluso aquellos que se autolesionaron sin intentos de suicidio presentaban un alto riesgo de desarrollar problemas de salud mental (depresión y ansiedad) comparados con adolescentes que no se habían autolesionado.
Además, eran más propensos a volver a autolesionarse y a tener problemas de abuso de sustancias (uso de drogas ilegales, fumar o excederse con el alcohol).