Megan Pryde ha fallecido este viernes a los 19 años por un cáncer de colon mal diagnosticado. La joven acudió al médico cuando sintió algunos síntomas a lo que le diagnosticaron un estreñimiento severo.
Ante la persistencia de tales, la joven volvió de nuevo y fue en esa segunda ocasión cuando los doctores pudieron esclarecer lo que sucedía. Megan tenía cáncer de colon. A esas alturas, el cáncer ya se había propagado y estaba en un estado avanzado.
Una vez lo supo con certeza, la joven quiso implicarse en la labor de concienciar a la sociedad de que este tipo de cáncer no afecta solo a personas mayores, sino que también puede atacar a los jóvenes. De hecho, los expertos indican que cada vez es más común encontrar este tipo de casos, de jóvenes con cáncer de colon. Su madre ha confesado que Megan recaudó fondos para la lucha contra el cáncer y que “tocó muchos corazones”.