El avión privado de Jennifer Lawrence tuvo que aterrizar de emergencia en un aeropuerto de Buffalo (Nueva York) después del fallo de los dos motores de la nave. Según adelantaba E! News, la actriz regresaba de Louisville tras pasar unos días con su familia cuando uno de los motores dejó de funcionar a 31.000 pies de altura.

Mientras lo pilotos empezaban la maniobra de aterrizaje de emergencia, el otro motor también falló y se produjo un descenso inesperado de la aeronave.

Pericia de los pilotos

Los pilotos fueron capaces de posar el aeroplano con seguridad en el aeropuerto, donde les esperaban preparados los vehículos de emergencia. La prensa estadounidense asegura que la estrella de 26 años se encuentra perfectamente, así como el personal que la acompañaba en ese momento y la tripulación, que demostraron su enorme destreza al gobernar el avión sin motores.