El joven de 21 años que fue arrestado el pasado sábado por irrumpir en una boda al grito de “Alá es grande” en Valladolid se encuentra en una Unidad de Psiquiatría tras quedar en libertad con cargos.

El joven, de nacionalidad marroquí, pasó a disposición del Juzgado de Instrucción número 3 de Valladolid, pero no prestó declaración ya que según el informe médico forense, no se encontraba en condiciones de salud óptimas para hacerlo.

Por ello ha ingresado en psiquiatría para determinar su diagnóstico y analizar un posible tratamiento. De todos modos, será investigado por la supuesta autoría de delitos de amenazas, desorden público, contra los sentimientos religiosos y daños. El joven no tenía antecedentes.