La policía británica sigue su paso firme para encontrar a todos los posibles responsables de lo que sucedió el lunes en el Manchester Arena. Tras el atentado, la investigación empieza a dar sus primeros frutos y los investigadores han tomado fotografías y analizado las características de la bomba que se utilizó para semejante atrocidad.
El análisis inicial de la bomba recolectada en la escena del crimen, no permiten deducir la cantidad ni el tipo de explosivo de que estaba compuesta la carga, pero su aspecto sugiere que fue hecha artesanalmente y con “una profunda reflexión y cuidado”, según el diario estadounidense The New York Times.
El diario americano ha publicado un total de ocho fotografías del detonador de la bomba, la batería, fragmentos de una mochila azul y multitud de objetos de metal como tornillos y tuercas. La bomba además tenía un detonador poco habitual, con un circuito impreso y no un simple interruptor, lo que hace pensar que había un retardador o incluso un receptor para activar la bomba a distancia.
La posible batería de la bomba
Tornillos y tuercas encontrados dentro del artefacto para causar el máyor daño posible