Brad Pitt ha concedido su primera entrevista tras el divorcio de Angelina Jolie. Ha sido a la revista GQ style. El actor ha dejado declaraciones muy jugosas, especialmente la mención a su adicción al alcohol, que confiesa que “se convirtió en un problema” durante los años de convivencia con su exmujer.
“No recuerdo ni un día desde que salí de la universidad en el que no hubiera estado bebiendo o hubiera tomado algo”, ha aceptado.
Además, explica que una vez formó su familia dejó todo excepto el alcohol y reconoce que el último año “estaba bebiendo demasiado”.
Sobre su vida después de que Angelina Jolie le pidiera el divorcio confiesa que “estaba devastado para volver a casa" y decidió quedarse unas semanas en casa de un amigo, David Fincher, mientras trataba de hacer frente a la pérdida de su familia.
Pitt asegura que ahora solo bebe zumo de arándanos y, pese a tener una bodega, ha dejado el vino también. Los psicólogos han jugado un papel importante en este tiempo y ha pasado por las manos de diversos terapeutas hasta encontrar el correcto, señala.
Además, tanto Angelina Jolie como Brad Pitt acuden juntos a la prestigiosa terapia de Katherine Woodward-Thomas, para ayudar a la expareja a organizar la familia.
Angelina Jolie fue la primera en hablar públicamente tras el divorcio y pese a que no quiso ahondar en el tema declaró: “Ha sido un momento muy difícil, y... somos una familia, y siempre seremos una familia, pasaremos por este momento y esperemos ser una familia más fuerte por ello".