La gestación subrogada a la que ocurrió Kiko Hernández no fue un camino de rosas. Afortunadamente, la experiencia ha terminado bien, pero aprovechando el Día del Padre, el colaborador de Sálvame ha desvelado el drama que supuso.
La vida de Kiko se convirtió en una autentica pesadilla tras adelantarse el parto tres meses y pillarle de imprevisto en España.
El colaborador ha regresado a su programa para dar todos los detalles de su calvario, reencontrarse con sus compañeros y presumir de las pequeñas. Según ha confesado Kiko, sus hijas se adelantaron tres meses antes de la fecha prevista, lo que no le permitió estar en el momento del parto y le obligo a modificar toda su agenda. "Las niñas nacieron prematuras porque Jimena comenzó a desprender la placenta. Mi gestante acudió al hospital porque sentía un dolor inusual. Le dijeron que si no nacían en una hora, las tres podrían morir" relata Kiko, que confiesa que no estar en el momento del nacimiento le supuso un dolor tremendo.